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Griñán queda 'tocado' a 49 días de las andaluzas

La derrota de Chacón debilita la posición del líder de los socialistas andaluces, que había apostado por la exministra de Defensa

 

ANTONIO AVENDAÑO

Todos los dirigentes interpelados por los medios de comunicación lo negaban en público, pero casi todos ellos lo admitían en privado: la derrota en este congreso no sólo ha sido para Carme Chacón, sino también para el líder del PSOE andaluz, José Antonio Griñán. En público, rubalcabistas como Gaspar Zarrías o Luis Pizarro recalcaban, más por obligación que por devoción, que 'Griñán no ha perdido el congreso', según palabras del primero, o que 'ni él ni la dirección andaluza se presentaban al congreso', según palabras del segundo.

El propio presidente andaluz declaró que no podía atribuírsele una 'posición débil' y que en el partido 'todos' se sentían 'ganadores'. Sin duda, pero unos debían sentirse más ganadores que otros. Las caras del propio Griñán, de su número dos en el partido, Susana Díaz, o de su consejera de Presidencia, Mar Moreno, no lograban disimular la decepción. La posición de Díaz resulta más comprometida, dado que su intervención personal fue decisiva para torcer el pulso al secretario provincial de Sevilla, José Antonio Viera, y negociar una lista con mayoría nominalmente chaconista. Esa debilidad de la sevillana Díaz puede trasladarse a la confección de la candidatura de Sevilla a las autonómicas del 25 de marzo: la salida más diplomática sería que Griñán encabezara la lista de Sevilla, y no la de Córdoba, ya que así se evitaría un choque de trenes entre Díaz y Viera, ya que este no aceptaría de buen grado que aquella encabezara la candidatura sevillana. Y siendo la número dos del partido, lo lógico es que fuera así, dado que Viera ya salió elegido como diputado en el Congreso el pasado 20 de noviembre.

Su elección como presidente del PSOE podría paliar la imagen de perdedor

En la elaboración de las listas, que comienza esta semana, puede haber tensiones añadidas a las propias de todo proceso de composición de candidaturas. En todo caso, la debilitada dirección regional tendrá mucho menos margen del habitual para imponer su criterio en caso de conflicto con las provincias.

Pero la mayor preocupación de los dirigentes consultados por Público es que, a sólo 49 días de las elecciones, la figura del presidente salga del congreso lo menos erosionada posible. Todos están de acuerdo en que el candidato del partido es especie protegida y hay que salvaguardarla a toda costa. Lo que anoche no estaba nada claro era cómo hacerlo. Un secretario provincial del sector de Rubalcaba admitía que no sabía cuál era la fórmula mejor, pero había que buscarla. 'Griñán y Rubal-caba tienen que hablar'.

La dirección regional tendrá menos margen para influir en las listas

Una opción para amortiguar el duro golpe a su autoridad interna sufrido por Griñán podría ser proponerlo para presidente del partido. El problema es que ese cargo ya lo ejerce Manuel Chaves, que ha jugado en este congreso a favor del exministro del Interior y cuyo enfrentamiento con quien lo sustituyó al frente del Junta y del partido es bien conocido. '¿A quien pierde se le premia y a quien gana le echa?', se preguntaba indignado ante esa posibilidad un responsable de la órbita de Chaves.

Un exconsejero del Gobierno andaluz admitía que 'el presidente no puede salir mal de este congreso', pero veía arriesgado situar de presidente del partido a alguien que puede ser desalojado del poder dentro de poco más de mes y medio. 'Las ejecutivas no se hacen para unos meses, sino para unos años', sentenciaba otro.

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