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"La igualdad, hasta el día de hoy, no ha existido nunca"

Shririn Ebadi es abogada, profesora universitaria y activista por los derechos humanos. 

ROCÍO PONCE

Aunque el mundo conoció a Shirin Ebadi (1947, Hamadán) el 10 de octubre de 2003, cuando se convirtió en la primera ciudadana iraní y la primera mujer musulmana en recibir el Nobel de la Paz por su defensa de los derechos humanos, especialmente los de mujeres y niños, esta abogada ya era de sobra conocida en el país persa. Allí se convirtió, con 27 años, en la primera mujer juez. Puesto del que disfrutó poco tiempo porque la revolución islámica de Jomeini, cuatro años después, la obligó a abandonar su sueño de hacer justicia. El tipo de justicia que ella defiende desde entonces como abogada y profesora universitaria.

A finales de agosto, la activista pasó por el festival de reggae Rototom Sunsplash en Benicàssim, donde afirmó que para erradicar la corrupción hay que hacer 'exactamente lo que ha hecho el 15-M: no ser indiferentes a las cosas que pasan en nuestra sociedad'.

'Tras la revolución iraní me dijeron que no podía ser juez porque era mujer'

¿Cuándo se dio cuenta de que era discriminada por ser mujer?

La primera vez fue justo después de la revolución. Me dijeron muy claramente: 'Como eres mujer, no puedes seguir siendo jueza'. Sentí que estaban siendo muy crueles conmigo, pero no fui la única, ya que Jomeini trató igual a todas las universitarias.

¿Ha sentido miedo por lo que pudiera pasarle por sus ideas y activismo?

'La discriminación sólo desaparecerá si cambia la educación'

Muchas veces. A mi marido lo detuvieron y torturaron, y mi hermana también ha sido perseguida, aunque ninguno de los dos se ha dedicado nunca a la lucha política. Lo he asumido de la mejor forma que he podido, pero no me callarán, porque creo profundamente en la libertad, en los derechos humanos y en la democracia; y seguiré luchando por ellos.

¿Cuál es la situación actual de la mujer en Irán?

Desde la revolución, las libertades individuales de la mujer se han visto muy reducidas pero, aun así, Irán no tiene una política tan prohibitiva hacia la mujer como el resto de la zona. El 85% del alumnado universitario son mujeres y muy activas. En las protestas de Teherán de 2009, tras las elecciones, la mayoría de los participantes eran mujeres. Una de las fallecidas se convirtió en un símbolo de la lucha reivindicativa femenina en Oriente.

¿Es más difícil para la mujer islámica luchar por sus derechos?

A primera vista, sí. Sin embargo, la lucha se traduce de distintas formas según las circunstancias y el momento en el que se encuentra cada sociedad.

¿Cree que en Europa la mujer también está discriminada?

Las mujeres, en cualquier parte del mundo, están discriminadas desde que nacen. Aunque la ley otorgue los mismos derechos a hombres y mujeres, la realidad es bien diferente. La igualdad, hasta el día de hoy, no ha existido nunca.

¿Por qué, pese a la ley, la realidad es discriminatoria?

Por la cultura patriarcal que existe en todas las sociedades. Por ejemplo, en su país, el salario de una mujer con el mismo empleo que un hombre es casi siempre menor. O, respóndame: ¿cuántas presidentas de consejos de administración de grandes empresas hay en España?

¿Cuál es la importancia de la educación para cambiar el sistema?

La educación es la forma más profunda de llegar al fondo de las personas, a las nuevas generaciones, y cambiar así ideologías y culturas. La discriminación hacia la mujer tiene su raíz en la cultura y un cambio en ella sólo puede llegar desde la educación.

¿Por qué cree que los movimientos indignados, como el 15-M, han surgido ahora?

No cabe duda de que el planeta es una pequeña aldea. El movimiento de España es conocido en todo el mundo y se ha trasladado a otros países. La corrupción se ha convertido en uno de los grandes retos de la sociedad actual y la situación económica de España muestra el resultado de políticas equivocadas que se han tomado en los últimos años. La gente, a través de ese movimiento, se manifiesta en contra de los políticos. Les piden cuentas y esa es la verdadera democracia, un país en el que ciudadanos preguntan a los políticos: '¿Por qué habéis hecho esto?'. La responsabilidad de un ciudadano en democracia va mucho más allá del voto.

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