El yerno de los Tous ha sido absuelto. El jurado popular concluyó ayer que Lluís Coromines actuó en legítima defensa y preso de un miedo insuperable cuando en diciembre de 2006 mató al presunto asaltante de una vivienda de los joyeros de un disparo en la cabeza. Coromines, que afrontaba una petición de siete años y medio de cárcel, pisó ayer la Audiencia de Barcelona por última vez durante el proceso, y salió libre.

Tras más de tres semanas de juicio y una disputa sin cuartel entre la fiscal y la defensa, el jurado se adhirió a la tesis de los abogados de Coromines y emitió un veredicto de no culpabilidad. Aunque la resolución no fue unánime. Seis de los nueve miembros del tribunal popular apoyaron la inocencia del acusado, suficiente para que la jueza anunciase la absolución de Coromines. Uno de ellos se negó a firmar el veredicto final.

El veredicto de no culpabilidad fue aprobado por seis votos a tres

El jurado se ha basado en parte en los informes periciales de los forenses que examinaron a Coromines, alguno de ellos encargados por la defensa. Los informes concluían que una persona que se encuentre en una situación de estrés máximo puede ver alteradas sus funciones cognitivas y de percepción, sufriendo el llamado efecto túnel. Por ello, el jurado dio credibilidad a la versión mantenida por Coromines según la cual percibió un movimiento brusco de uno de los ladrones cuando se acercó a ellos con su vehículo y, como relató el yerno de los Tous durante el juicio, en ese momento se vio 'muerto'.

Según el veredicto emitido por el jurado, el yerno de los Tous disparó de forma 'irracional' sin ser consciente de los riesgos que comportaba su acción, ya que 'no tenía tiempo de evaluarla'. El tribunal popular considera que Lluís Coromines 'no disponía de otras alternativas de conducta que disparar para responder a la amenaza', y que dichos disparos 'eran necesarios para defenderse'.

El jurado afirma que Coromines disparó de forma irracional movido por el miedo

Así pues, el jurado mantiene que la actuación de Coromines fue proporcional a la amenaza a la que creía enfrentarse, dando así credibilidad a la versión de Coromines, que alegó durante el juicio que interpretó el movimiento brusco de uno de los ladrones como que iba a coger una arma.

El veredicto final desmintió l­a­­­­ te­sis de la fiscal, según la cual Coromines habría disparado a los asaltantes para evitar que huyeran, actuando de forma 'profesional' como jefe de seguridad de los Tous. El jurado considera probado que Coromines ejercía como coordinador de la seguridad de la família Tous, un hecho que el acusado había negado durante todo el juicio. También reconoce que el yerno de los Tous ha cambiado su versión de los hechos a lo largo del tiempo, desde su primera declaración en 2006 en el Juzgado de Instrucción de Manresa hasta el juicio que finalizó ayer en Barcelona.

Una vez confirmada la absolución, la familia de Coromines se fundió en abrazos. La celebración familiar se trasladó a una sala cerrada de la Audiencia de Barcelona oculta a las cámaras. El mensaje que la familia de los joyeros quiso transmitir fue de 'satisfacción contenida', ya que a pesar de la absolución 'ha muerto una persona' y, como declaró Coromines el último día de vista, lo que pasó supone un peso que llevará 'toda la vida'.

El abogado de Coromines, Óscar Morales, resumió al terminar el juicio que 'han sido unas semanas muy difíciles y muy duras, en las que se ha juzgado un caso excepcional y único. El jurado ha reconocido que Coromines reaccionó en unas circunstancias extremas, y lo ha disculpado'. La fiscal anunció que estudia recurrir la absolución del yerno de los Tous ante el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya.