Se hacían pasar por pescadores pero en realidad eran narcotraficantes. La Policía Nacional ha detenido en Málaga a siete falsos pescadores cuando descargaban 700 kilos de hachís procedente de Marruecos de una embarcación de recreo en Málaga.

Según ha informado este viernes la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil, los arrestados simularon una jornada de pesca en Marruecos, cargaron la droga y la ocultaron en habitáculos especialmente preparados en la embarcación, mientras que un octavo miembro de la organización fue detenido en Barcelona.

Dos de los arrestados están vinculados con la camorra napolitana y estaban siendo investigados por las policías francesa e italiana por tráfico de drogas.

Las investigaciones se iniciaron a finales de junio sobre un grupo de delincuentes italianos asentados en Barcelona y Málaga que disponía de embarcaciones de recreo en el puerto de Montenegro (Serbia) con las que planeaban introducir la droga en España.

Los agentes descubrieron que estos individuos, vinculados a la mafia italiana, se habían asociado con un grupo de españoles residentes en la Costa del Sol, para traficar con hachís procedente de Marruecos.

Para el transporte de la droga, la organización utilizaba la infraestructura de uno de los detenidos, propietario de una empresa náutica en la Caleta de Vélez-Málaga, desde donde los barcos se trasladaban a Marruecos, donde simulaban una jornada de pesca.

La Policía detuvo a los siete falsos pescadores cuando acaban de ocultar los 44 fardos ocultos en un doble fondo de la embarcación y se disponían a transportarlos en varios vehículos a una nave de un polígono industrial de la ciudad, mientras que el octavo componente fue arrestado seguidamente en su domicilio en Barcelona.

En la operación han sido intervenidas la embarcación, de 6 metros de eslora, 4 vehículos, un ordenador portátil, varios teléfonos móviles, diversa documentación y 7.000 euros en efectivo, entre otros efectos.

En otra operación antidroga, la Guardia Civil desarticula una banda que transportaba alijos de hachís a Francia atravesando la península en vehículos a más de 200 kilómetros por hora. Es la segunda red que utiliza el llamado 'go faster routier' que cae en las últimas semanas.