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El PP estudia premiar a Fabra con un cargo de edil no electo

Durante los siete últimos años, Carlos Fabra ha estado envuelto en un escándalo de presunta corrupción

BELÉN TOLEDO

El alcalde de Castellón, Alberto Fabra, afirmó ayer que su partido considera la posibilidad de nombrar a Carlos Fabra, presidente en funciones de la Diputación de Castellón, concejal no electo del ayuntamiento. Durante los siete últimos años, Carlos Fabra ha estado envuelto en un escándalo de presunta corrupción, ya que está imputado por cohecho, tráfico de influencias y fraude fiscal.

Numerosas revelaciones lo han puesto durante este tiempo en el centro de la polémica, como la publicación de una grabación en la que se le oía presumir de haber colocado 'no sé a cuántos' en los órganos que dependen de la institución que preside.

Fabra no repetirá en su cargo como presidente por decisión propia. En 2008 anunció, además, que las elecciones de mayo de 2011 supondrían el fin de su vida política.

Pero los últimos movimientos dentro del PP provincial muestran que Fabra ha cambiado de opinión y podría ocupar el cargo de concejal no electo.

Desde este puesto, participaría de la vida política del ayuntamiento aunque no tendría ni voz ni voto, y tampoco un sueldo. Sí seguiría disfrutando de la escolta pagada con dinero público que lo ha acompañado hasta ahora. Hoy el equipo de Gobierno Local decidirá si finalmente Fabra ocupa este puesto. Además, se conocerá si cobrará dietas, o algún otro tipo de retribución por su trabajo.

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