Por si quedaba alguna duda, ayer quedó resuelta. La dirección federal del PSOE apoya la persecución que el Partit Socialista del País Valencià (PSPV) y su líder, Jorge Alarte, están haciendo del caso Gürtel. Un respaldo expreso que supone la automática desautorización del otro precandidato a las primarias valencianas, Antoni Asunción, que se había quejado del papel 'fiscalizador' en la causa asumido por la ejecutiva regional.

La línea fue marcada por la secretaria de organización, Leire Pajín, en rueda de prensa tras la reunión de la comisión permanente de su partido. 'El comportamiento del PSOE con todos los casos de corrupción siempre ha sido ejemplar, y es denunciar allí donde están porque es nuestro deber, así como actuar de forma tajante cuando se han producido en nuestras filas', aseguró.

El día 15, Asunción, ministro del Interior con Felipe González, indicó que el PSPV debería dejar de actuar como 'fiscal' en la Gürtel y aclarar 'que es una alternativa capaz de cambiar las cosas'. Alarte y su equipo han acorralado semana tras semana en Les Corts a Francisco Camps y se han personado en el sumario Gürtel y en el caso de los trajes.

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Asunción, que a principios de mes anunció por sorpresa su intención de concurrir a las primarias del PSPV, ha venido sosteniendo que la Gürtel no debería centrar la oposición a Camps. 'Hasta que no llegue al final [la causa] no sabemos si lo que tiene [el president] es una pena de banquillo o hay algo más'.

Pese a la desautorización, Pajín añadió que respetaba 'profundamente' las palabras de Asunción. Son los militantes los que 'deben reflexionar y decidir' si les gusta más Alarte o Asunción. El sábado se sabrá de modo definitivo si el ex ministro tiene los más de 3.000 avales necesarios para ser candidato.