Las Juntas Generales de Álava vivieron ayer una sesión kafkiana en la elección de su Mesa, que presidirá Juan Antonio Zárate, del PP, gracias al apoyo del PSE y a los votos en blanco de EB. La coalición tiene el poder de desequilibrar la balanza en la Cámara alavesa, ya que PP y PSE suman 25 escaños, mientras que PNV y Bildu tienen 24. Las dos junteras de Ezker Batua tendrán el poder de decidir qué partido gobernará Alava: el PP o el PNV.

Su papel clave ya se dejó sentir ayer en la elección de la Mesa de las Juntas, aunque el embrollo llegó con la elección de la primera vicepresidencia. Tras la votación secreta, la representante del PSE, Eva Jiménez, logró 26 votos, uno más que el junt­­ero del PNV Pedro Elosegi. Por un momento se interpretó que EB había repartido sus dos papeletas entre ambos candidatos, pero después aclaró que sólo había votado al juntero nacionalista. El PNV pensó que debía de haber un 'error' en el recuento y pidió que se realizara de nuevo, pero fue en vano. El letrado de las Juntas, que previamente había contado los votos hasta en cuatro ocasiones, comunicó que estos ya habían sido destruidos.

Lo rocambolesco del caso no quedó ahí. Tras el pleno, la portavoz del PSE, Cristina González, afirmó que el resultado de la votación era correcto y que respondía a un acuerdo entre su partido, PP y EB.

La juntera de la coalición Nerea Gálvez negó de forma taxativa que hubieran alcanzado tal pacto con socialistas y conservadores: 'Desmiento absolutamente todo', afirmó, antes de insistir en que, en la segunda votación, habían votado sólo al candidato del PNV. 'Venimos libres de ataduras'. Poco después, el PSE anunciaba que iba a ceder un juntero a EB para que pueda constituir grupo propio.

Aparte de este lío, en la Mesa estarán todos los partidos: el PNV ocupa finalmente la vicepresidencia segunda, mientras que EB y Bildu tienen sendas secretarías.

En Navarra, Alberto Catalán (UPN) salió elegido presidente del Parlamento foral, en cuya Mesa estarán representados también PP, PSN, NaBai y Bildu. Catalán recibió el apoyo del PSN dentro de las negociaciones para la formación de gobierno.

Por otra parte, Bildu afirmó, ante la moción del PP, que 'no entrará en provocaciones' y que su postura contra la violencia es 'firme'.