Motor

El buque insignia alemán completa su gama con una versión que consume 2,8 litros, a la venta en octubre desde 122.200€.

El complemento ideal para un vehículo híbrido es la posibilidad de enchufarlo a la red y disponer de una mayor autonomía al iniciar la marcha. Esta tecnología se ha aplicado en el Mercedes-Benz Clase S que recibe la denominación S 500 Plug-in Hybrid, convirtiéndose en el primer modelo enchufable de la firma alemana.

Con esta combinación de mecánica híbrida y un punto de recarga desde el exterior, el Clase S bate un récord de eficiencia, pues ha homologado una cifra media de consumo de 2,8 litros –según la normativa de la UE para este tipo de vehículos que hacen más de la mitad del ciclo utilizando la energía de las baterías- y unas emisiones de CO₂ de 65 g/km.

Bajo el capó delantero lleva un motor de gasolina V6 3.0 que tiene una potencia de 333 CV (245 kW), al que se une un motor eléctrico de 85 kW de potencia alimentado por un conjunto de baterías de iones de litio, sumando una potencia final de 442 CV (330 kW) y un par máximo de 650 Nm.

Las baterías tienen una capacidad de 8,7 kWh y se recargan en una toma doméstica durante cuatro horas o en un Wallbox de carga rápida en menos de tres horas. Con las baterías llenas el S 500 Plug-in Hybrid puede recorrer hasta 33 kilómetros a una velocidad máxima de 140 km/h en modo completamente eléctrico, es decir, sin emisiones contaminantes directas.

El conductor puede elegir entre varios modos de conducción, solo eléctrico o híbrido combinado, primando la recarga de las baterías con la energía de la frenada y el alternador, reservando la energía eléctrica para un uso posterior en zonas restringidas del centro de la ciudad o aparcamientos, o la máxima potencia, donde los dos motores suman sus fuerzas para una conducción más dinámica.

Al situar las baterías de iones de litio en el maletero, este pierde algo de capacidad, pues pasa de los 510 litros que tienen las versiones con motor de combustión interna a los 395 que ofrece el modelo híbrido enchufable, una cifra que no está a la altura de un coche de esta categoría.

Un elemento de confort que incluye el nuevo Clase S 500 Plug-in Hybrid es la posibilidad de climatizar el habitáculo mediante un sistema de programación para que los ocupantes encuentren la temperatura adecuada en el momento de montarse en el coche para realizar un desplazamiento, algo de gran utilidad en lugares con una climatología extrema, tanto por calor como por frío.

La versión híbrida enchufable del Mercedes-Benz Clase S estará a la venta únicamente en carrocería larga (5,25 metros frente a los 5,17 metros del Clase S normal) a mediados de septiembre con un precio de 122.200 euros, a los que se podrán restar las ayudas del Gobierno por la compra de un vehículo híbrido.