Los nuevos dirigentes de la Unión Europea parecen dispuestos a romper el corsé que desde 1996 mantiene en sus relaciones con Cuba y adoptar una política más 'elástica' hacia la isla, acompañando así la línea más flexible adoptada por Barack Obama y en sintonía con las tesis del ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos.

'Si Estados Unidos está revisando su posición, habrá que ver también cómo la revisamos nosotros', dijo ayer Catherine Ashton, la nueva responsable de la política exterior europea, que compareció en rueda de prensa con Moratinos y que se reunió también con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

Ashton, que en su tercer día en funciones como Alta Representante para la Política Exterior visitó Madrid no quiso ir más allá y se limitó a señalar que serán los gobiernos de la UE los que decidirán cómo se concreta esa revisión.

No obstante, el presidente del Parlamento Europeo, el polaco Jerzy Buzek, también de visita en España, se apuntó a la tesis de que la política exterior europea 'ha de ser elástica, flexible', y citó como modelo el trato con Bielorrusia. 'Si países que violaban los estándares europeos en derechos humanos los respetan, podremos portarnos de forma flexible', indicó en la comparecencia que hizo con el presidente del Gobierno español.

La posición común de la UE hacia Cuba condiciona las relaciones bilaterales a avances concretos en democracia y derechos humanos, y Moratinos se ha mostrado partidario en diferentes ocasiones de sustituirla por un acuerdo de colaboración negociado conjuntamente.

El presidente llevó diez ministros a su reunión con la Eurocámara

No obstante, el Gobierno no ha presentado la eliminación de la Posición Común como objetivo prioritario de la próxima Presidencia española, en el primer semestre de 2010. Las divergencias con el PP han hecho que las relaciones con Cuba quedaran excluidas del pacto suscrito por el PSOE con los principales partidos para respaldar la Presidencia española.

Moratinos explicó que, durante sus reuniones con Ashton, llegaron a varios acuerdos, sobre todo en lo que se refiere al funcionamiento del servicio europeo de acción exterior, cuya implantación es uno de los principales retos de la sustituta de Javier Solana. El ministro español destacó la 'sintonía absoluta' del Ejecutivo con los nuevos cargos de la Unión Europea. Su éxito, según vaticinó, 'será el éxito de Europa'.

Por ese éxito hizo también votos José Luis Rodríguez Zapatero, que se reunió en la Moncloa con los presidentes del Parlamento Europeo y de los grupos que lo integran. Los miembros de la Conferencia de Presidentes de la Eurocámara, que hoy visitarán el Congreso y el Senado, analizaron los preparativos de la Presidencia española con Zapatero y diez miembros del Consejo de Ministros, entre ellos los tres vicepresidentes.

Zapatero: 'Los próximos seis meses serán decisivos para la UE'

Anticipándose a la Presidencia de turno que asumirá el 1 de enero, expresó su 'respaldo desde el primer día' a los nuevos cargos comunitarios para afrontar lo que calificó de 'seis meses decisivos para la Unión Europea'.

Zapatero recordó que el Tratado de Lisboa atribuye al Parlamento 'una posición de más relevancia, tanto en aspectos legislativos como políticos'. A partir de esta consideración, asumió el compromiso de establecer una 'cooperación más intensa y fluida' entre la Presidencia y el Parlamento. Zapatero expondrá el plan de trabajo para el semestre español ante el plenario de la Eurocámara.