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Un activista chino y sus abogados son apaleados

La agresión ocurre tras difundir su arresto domiciliario «ilegal» en un vídeo en la red

DAVID BRUNAT

China sigue aplastando a la disidencia con su rutinaria brutalidad dos meses después de la entrega del Nobel de la Paz al disidente Liu Xiaobo. Los abogados del activista pro derechos humanos Chen Guang-cheng denunciaron ayer que la Policía los asaltó esta semana en un restaurante de Pekín, los metió en un coche patrulla y, ya en comisaría, los interrogó y golpeó. Al menos uno de ellos sigue detenido.

Este incidente coincide con los ataques que han sufrido en los últimos días varios periodistas extranjeros que se acercaron a Linyi, la aldea al este del país donde reside Chen. Decenas de matones y agentes de paisano llevan días apostados en la aldea para golpear y dañar las cámaras de cualquier periodista que acuda al lugar, denuncian las víctimas.

Chen, uno de los activistas chinos más destacados, regresó a la luz pública la semana pasada, cuando denunció mediante un vídeo el arresto domiciliario que sufre desde septiembre. Un arresto 'ilegal', según dijo Chen, ya que justo en septiembre terminó su condena de cuatro años de cárcel por denunciar los más de 7.000 abortos forzosos practicados por el Gobierno de su provincia, Shandong, para cumplir con la política del hijo único. Fue condenado por 'alterar el orden público'.

A raíz de la emisión del vídeo, Chen, un abogado ciego, y su esposa, fueron apaleados en su casa y se les denegó el tratamiento médico posterior, según denunció Chinese Human Rights Defenders.

China suele actuar con mano dura cada vez que se acerca una fecha señalada, en este caso la reunión anual del Congreso Nacional Popular (Parlamento) que comenzará el 5 de marzo. Además, las actuales revueltas en el mundo árabe a favor de la democracia no están sentando nada bien a Pekín, que está censurando en todos los medios la información a sus ciudadanos, especialmente en internet.

En este sentido, el portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Ma Zhaoxiu, advirtió ayer a Estados Unidos de que no use sus llamadas al fin de la censura en internet como 'una excusa para interferir en los asuntos internos de China'. Ma se refería al anuncio de Hillary Clinton de que Washington lanzará una iniciativa para ayudar a los disidentes de todo el mundo a sortear la censura de sus gobiernos en la red.

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