La caída de los regímenes dictatoriales en el mundo árabe no garantiza el final de las revueltas. En Túnez, donde ayer murieron tres personas a causa de los enfrentamientos entre la Policía y los manifestantes, se han reanudado las represiones violentas.

Las fuerzas policiales emplearon gases lacrimógenos contra los manifestantes que salieron de nuevo a las calles para reclamar la dimisión en pleno del Gobierno de transición del país y del primer ministro, Mohamed Ghanuchi, único miembro del nuevo Gobierno que pertenece al antiguo régimen derrocado.

Los disturbios vividos ayer en la capital tunecina, cuando se cumple cerca de mes y medio desde la caída del régimen de Ben Ali, provocaron el cierre de todos los comercios cercanos a la sede del ministerio del Interior y la interrupción del tránsito a los viandantes por la zona.

Pese a la prohibición de circular para personas y automóviles, miles de personas invadieron hoy la principal arteria de la capital y sus calles adyacentes gritando consignas contra el Gobierno.

Los manifestantes se dividieron en dos grupos, el primero de los cuales comenzó a lanzar piedras contra las fuerzas policiales, desplegadas en gran número por la avenida y apoyadas por blindados de la Guardia Nacional. Prendieron fuego a neumáticos, contenedores de basura y a una motocicleta estacionada en las inmediaciones.

El segundo contingente de manifestantes se concentró cerca de la embajada de Francia, en la parte de Burguiba más próxima a la medina, e instaló barricadas en plena calle.

Cerca de 100 personas fueron detenidas en los disturbios del sábado

Las fuerzas policiales intentaron dispersar a los manifestantes con proyectiles de gases lacrimógenos y disparos al aire a modo de advertencia. Otro grupo formado por centenares de manifestantes se unió posteriormente a la protesta en la avenida entre lemas contra Ghanuchi.

El Ministerio de Interior precisó que más de cien personas fueron detenidas el sábado, 'esencialmente por actos de vandalismo' y fuentes sindicales informaron de que en las localidades de Tozeur, Kaserín y Metraui se han registrado también disturbios desde la pasada noche.

Según estas fuentes, esos disturbios están siendo provocados por milicias del antiguo partido del poder, la Reagrupación Constitucional Democrática (RCD), la formación del presidente Ben Alí.