Un empleado del aeropuerto internacional de Fráncfort en Alemania, el mayor del continente europeo, ha sido detenido por colocar cámaras ocultas en los baños de señoras con las que grababa a las mujeres que los utilizaban. Un portavoz de la policía local informó hoy de que la detención del hombre, de 50 años, se produjo a principios de mes y precisó que éste trabajaba desde hace años como guía de quienes visitaban las instalaciones del aeródromo para conocer su funcionamiento.

El voyeur fue desenmascarado de manera casual cuando una mujer descubrió una de las cámaras al cambiar el rollo de papel de la cabina que utilizaba, mientras la policía encontró una segunda al realizar un registro en profundidad. El acusado, en libertad bajo fianza, ha confesado los hechos, no ha querido explicar los motivos y ha sido despedido fulminantemente por Fraport, la empresa que gestiona el aeropuerto internacional de Fráncfort.

Las dos minicámaras fueron halladas en unos baños femeninos, junto a uno de los aparcamientos del aeropuerto, y funcionaban mediante un dispositivo que las activaba cuando alguien manipulaba la manilla de las cabinas, transmitiendo la grabación a un mecanismo con una tarjeta de memoria. En el registro de la vivienda del sospechoso en Fráncfort, los agentes encontraron otras dos cámaras en miniatura y un ordenador en el que almacenaba las imágenes.

La policía analiza actualmente todo el material incautado para conocer el alcance de las grabaciones y si el sospechoso llegó a intercambiar imágenes a través de internet.