El conductor del autocar accidentado en el sur de Suiza se disponía a cambiar un DVD del reproductor del vehículo justo antes de sufrir el accidente que ha causado 28 muertos y 24 heridos, según los relatos de los supervivientes que la Policía no confirma.

Una investigación conjunta del diario suizo Aargauer Zeitung y del belga Het Laatste Niews, publicada en sus respectivas ediciones digitales, apunta a este momentáneo desvío de atención del conductor del autocar como posible causa del trágico accidente.

Ambos periódicos recogen las declaraciones de algunos de los niños heridos, que contaron cómo un acompañante del grupo pasó un DVD al conductor inmediatamente antes de que se estrellase contra una pared de un túnel en la localidad de Sierre.

Fuentes del gobierno regional han confirmado al diario suizo que los niños habían relatado esta versión de los hechos a sus padres y al personal de los hospitales del cantón de Valais, donde se encuentran ingresados.

Ese pequeño segundo de despiste al introducir el DVD en el aparato de reproducción podría haber bastado para que el autocar rozara el bordillo de la autovía y el conductor perdiera el control del vehículo. Una explicación que los conductores consultados por los diarios consideran plausible.

El portavoz de la Policía del cantón de Valais, Renato Kalbermatten, ha dicho desconocer esta descripción de la reconstrucción de los hechos, y considera que en estos momentos le parece 'pura especulación'. Según esta misma fuente, tal movimiento del conductor no habría sido captado por las cámaras de vigilancia del túnel.

Los directivos de la compañía propietaria del autocar, Toptours, por su parte, descartan que los niños hayan podido ver al conductor introducir un DVD en el reproductor debido a que los asientos de los viajeros se encontraban en este modelo de autobús -un Altano de la marca Vanhool- más elevados que la cabina del chófer. 'Es imposible que un niño haya visto al chófer manipular el reproductor del DVD u otro aparato', señalaron el gerente de Toptours, Tom Cooremans, y el director de la Federación belga de Autocares (FBAA), Vincent Mannaerts.

La compañía ha descartado además que el conductor hubiera conducido ebrio, dado que no se ha encontrado rastro alguno de alcohol en su organismo, según la Policía suiza. Tampoco la fatiga puede haber sido causa del accidente, puesto que los dos conductores pasaron la noche en Sierre y descansaron durante la jornada antes de partir hacia Bélgica, indicó.

Toptours, que no obstante no puede descartar un error humano, considera poco probable que un fallo técnico haya causado el accidente, dado que el autocar fue adquirido en 2002 y las revisiones técnicas estaban al día. La compañía está a la espera de los resultados de la investigación.