Público
Público

500 implicados en una red de sobornos refleja el descontrol local en China

Un gran escándalo de corrupción destapado este fin de semana ha obligado a destituir a casi la totalidad de una asamblea legislativa local

ANTONIO BROTO / EFE

Un gran escándalo de corrupción destapado este fin de semana, que ha obligado a destituir a casi la totalidad de una asamblea legislativa local china, ha mostrado la falta de control del poder local en China, motivando llamadas del Partido Comunista de China (PCCh) a continuar la lucha contra la corrupción. El caso afecta a la asamblea legislativa de la ciudad de Hengyang, en la provincia central china de Hunan, donde se reveló que más de medio millar de sus miembros -todos menos 15- están implicados en un caso de corrupción, según denunciaba ayer sábado la agencia oficial china Xinhua.

De acuerdo con investigaciones preliminares, 512 de los 527 legisladores presentes en el hemiciclo fueron sobornados por un monto total de 110 millones de yuanes (18,14 millones de dólares) en la elección de 56 de ellos como representantes para la asamblea legislativa provincial, institución inmediatamente superior en la jerarquía comunista. La elección se celebró hace un año, del 28 de diciembre de 2012 al 3 de enero de 2013, y en ella también se ofrecieron coimas a 68 empleados de la asamblea local, detalló Xinhua.

Tras destaparse el escándalo, los 512 legisladores locales han dimitido, mientras que los 56 que de entre ellos fueron elegidos como representantes provinciales fueron destituidos, explicó un comunicado de la asamblea provincial de Hunan. Otros cinco legisladores provinciales más que no ofrecieron sobornos fueron a pesar de ello destituidos por ocultar el caso o mostrar negligencia, la misma suerte que corrieron tres legisladores municipales de Hengyang que no habían aceptado dinero a cambio de su voto.

'El fraude tiene un impacto funesto, dado el alto número de legisladores implicados y la gran cantidad de dinero', señaló la asamblea provincial de Hunan en su comunicado, donde se calificó el caso como 'desafío al sistema chino de asambleas populares, la democracia socialista y la disciplina de partido'. El sistema legislativo chino establece que las asambleas locales eligen a los representantes de sus instancias superiores provinciales, y éstos designan los miembros de la Asamblea Nacional Popular, el máximo órgano legislativo del régimen comunista.

La magnitud del escándalo ha motivado que hoy le dedique su editorial el Diario del Pueblo, voz del Partido Comunista, donde se ha subrayado que los castigos a los legisladores 'muestran la resolución de China por luchar contra escándalos electorales y mantener la confianza del pueblo'. 'El número de implicados es enorme, la cantidad es grande, el problema es grave, los efectos son perniciosos', asegura el diario, que pide que el caso sea tratado con seriedad por los órganos de disciplina del partido. 'Castigar decididamente la corrupción, hacerle frente, es necesario para el Estado de Derecho, y el caso de Hengyang debe elevar la alerta', añade el comentario.

El presidente chino, Xi Jinping, mostró en los primeros meses de su gobierno que la lucha contra la corrupción es una de sus prioridades, y señal de ello han sido las condenas a cadena perpetua de importantes ex altos cargos como Bo Xilai, ex ministro de Comercio, y Liu Zhijun, antes a la cabeza del influyente Ministerio de Ferrocarriles. Tanto Xi como la línea del PCCh han advertido a lo largo de este año que la campaña se dirige 'tanto contra tigres como contra moscas', metáfora con la que indican que tanto las instancias locales como las nacionales están en el punto de mira, en un país donde frecuentemente las condenas por corrupción sólo han afectado a bajos niveles de poder.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias de Internacional