La tensión en la península de Crimea, recién anexionada a Rusia sin el reconocimiento de la UE ni de EEUU, sigue creciendo. Al menos una persona de cada bando ha muerto pocas horas después de que el presdiente ruso, Vladimir Putin, firmase la incorporación de la península y la ciudad de Sebastopol a la Federación Rusa en la Duma (Parlamento).

La primera muerte corresponde a un militar ucraniano, caído por disparos de hombres armados con uniformes militares rusos tras el asalto a una base militar de la capital crimea, Siferópol, en el que ha habido otro herido, según informó el portavoz del Ministerio del Interior ucraniano en Crimea, Vladislav Selezniov.

Este portavoz añadió que 'todos los militares [ucranianos] fueron arrestados y les quitaron los documentos y el dinero. Les sacaron, les formaron y les desarmaron'. 'Un militar ucraniano fue herido en el cuello y en la clavícula. No han dejado pasar a la ambulancia y ha fallecido a causa de sus heridas', dijo Seleznyov.

La segunda víctima es un miembro de las autodefensas rusas, herido junto a otros dos compañeros por disparos de francotiradores, cerca de una base militar ucraniana también en Simferópol, según informan medios rusos, que citan al Ministerio del Interior crimeo.

Según la fuente, 'los disparos provenían del mismo punto e iban dirigidos en dos direcciones: contra las autodefensas que estaban comprobando una llamada que advertía de la presencia de hombres armados en un edificio en obras, y en dirección a la base militar ucraniana cercana'.

La confusa información se refiere al mismo lugar donde, según el Ministerio de Defensa de Ucrania, murió el militar ucraniano.

Según la versión del Ministerio del Interior prorruso de Crimea, 'uno de los combatientes de las autodefensas (rusas) resultó muerto y otro herido. Y un hombre de la cercana base militar ucraniana también resultó herido'.

La fuente indica que no excluye que se trate de una provocación dirigida a desestabilizar la situación cuando Crimea acaba de firmar un tratado de adhesión a Rusia.

Muchas instalaciones militares ucranianas en Crimea han estado bajo control de las fuerzas rusas durante varias semanas antes al referéndum que se celebró el domingo.

El primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, ha afirmado que el conflicto en Crimea ha entrado en 'una fase militar' y ha acusado a Rusia de haber cometido un 'crimen de guerra' al haber disparado contra un militar de Ucraniano.

'El conflicto está pasando de lo político a lo militar a causa de los soldados rusos' ha señalado Yatseniuk. 'Hoy han disparado contra militares ucranianos y esto es un crimen de guerra sin caducidad bajo un estatuto de limitaciones'.

El primer ministro ucraniano ha afirmado que ha ordenado al ministro de Defensa de Ucrania convocar una reunión con sus homólogos en Gran Bretaña, Francia y Rusia, signatarios de un tratado de 1994 que garantiza las fronteras ucranianas para 'evitar una escalada del conflicto'.

Los militares ucranianos presentes en la península de Crimea tienen autorización de Kiev para utilizar sus armas si entienden que sus vidas corren peligro, según la oficina del presidente interino, Oleksander Turchinov.

El anuncio se produce poco después de que el Ejército ucraniano confirmase la muerte de un soldado en un asalto a una base militar de Crimea.