Público
Público

Un acuerdo con alfileres

La cumbre europea aprueba un plan anticrisis ambiguo para contentar a Alemania

 

DANIEL BASTEIRO

Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) pactaron ayer reactivar la economía con un plan anticrisis que estira tanto el presupuesto comunitario como el de los países miembros, varios de los cuales están inmersos ya en un déficit mayor que el permitido por la legislación comunitaria.

En la cumbre ordinaria de la Presidencia francesa, los 27 aprobaron la propuesta presentada la Comisión Europea, pero con algunos retoques que le quitan consistencia. Así, afinaron la fórmula que define los recursos que hay que dedicar y sustituyeron que el esfuerzo presupuestario debe ser 'equivalente al' 1,5% del PIB comunitario por un 'alrededor del 1,5%'. El objetivo sigue siendo unos 200.000 millones de euros, pero la expresión aprobada permite quedarse por debajo de esa cifra, lo cual satisface las aspiraciones de Alemania. Su ministro de Finanzas, Peer Steinbruck, anunció que su Gobierno limitará su aportación los 31.000 millones de euros en inversión (un 1,2% de su PIB). Gran Bretaña había presionado a Berlín para que pusiera más dinero.

En todo caso, Gordon Brown, visto como el arquitecto de plan de rescate financiero, ensalzó las virtudes de una apuesta coordinada que terminará por reactivar el crédito a consumidores y pequeñas empresas.

'Hacen falta políticas monetarias, pero sólo con esas políticas no basta, necesitamos esfuerzos fiscales', aseguró en referencia a las bajadas de impuestos impulsadas en su país, en especial las del IVA, que la eurozona no comparte. Además, coincidiendo con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, Brown puso sus miras al otro lado del Atlántico. 'Cuando tome posesión un nuevo presidente [Barack Obama] comprometido con la política fiscal, tendremos que mostrar que Europa y EEUU podemos trabajar juntos'.

El plan aprobado ayer, además de diluir el objetivo cuantitativo, no especifica lo que aportará cada país, lo cual impedirá evaluar si el plan se cumple o no. Para avanzar en esa dirección, además de para preparar la próxima cumbre del G-20 en Londres, la presidencia francesa de la UE ha convocado una nueva reunión de ministros de Economía la semana que viene. En ella, los 27 tendrán ocasión de plasmar en la práctica el acuerdo político logrado ayer.

El texto de conclusiones expresa su preocupación por el alto nivel del Euribor. Además, entre las medidas específicas se encuentran la inversión de 5.000 millones del dinero no gastado o la elevación del techo de las subvenciones y ayudas que no requieren autorización de la UE (de 200.000 euros a 500.000).

Asimismo, el Banco Europeo de Inversiones aumentará su presupuesto a 30.000 millones en los próximos dos años para conceder más créditos a bajo interés a pymes. También se otorgarán créditos blandos al sector del automóvil por valor de 5.000 millones para que produzca coches más ecológicos y se invertirá en la penetración de la banda ancha o las interconexiones energéticas.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias de Internacional