Manifestantes de Reporteros Sin Fronteras intentaron el lunes interrumpir la ceremonia de encendido de la antorcha en el antiguo estadio de Olimpia, en Grecia, como protesta por 'la situación dramática de los derechos humanos' en China.

Uno de los activistas logró superar las estrictas medidas de seguridad en el recinto de Olimpia y pudo levantar brevemente una pancarta que llamaba al boicot de los Juegos debido a la represión policial china en Tíbet. Lo hizo durante la intervención de Lui Qi, presidente del Comité Organizador de los Juegos, aunque la policía le interceptó antes de que alcanzara su altura.

Neutralizados 

La acción ha sido reivindicada por Reporteros Sin Fronteras a través de un comunicado. RSF aseguró que su secretario general, Robert Ménard, y otros dos integrantes de la organización fueron 'neutralizados' por los agentes de seguridad griegos tras desplegar una bandera en la que se representan los aros olímpicos en forma de esposas, una manera de aludir a lo que consideran falta de libertades en China.

'Si el fuego olímpico es sagrado, los derechos humanos lo son todavía más. No podemos dejar que el Gobierno chino se apropie de la llama, símbolo de paz, sin denunciar la situación dramática de los derechos humanos en el país', apunta la nota.

En esta línea, señala que 'todos los medios son buenos para denunciar las violaciones graves de los derechos', según RSF, que recuerda la 'censura impuesta' a la prensa y a la prohibición de acceder al Tíbet.

Por eso la organización defensora de la libertad de prensa reitera su llamamiento al boicoteo de la ceremonia de apertura de los Juegos por parte de los líderes políticos, el 8 de agosto.

Triste 

El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Jacques Rogge, declaró estar 'triste' por los breves incidentes ocurridos en la ceremonia de encendido de la llama en Olimpia, aunque resaltó que al menos éstos fueron 'no violentos'.

'Pienso que siempre es triste cuando hay manifestaciones, pero éstas fueron no violentas y eso es lo más importante', declaró Rogge a periodistas, poco después de la ceremonia.