La policía local de Bruselas ha levantado el perímetro de seguridad establecido en una calle aledaña a la sede del Consejo de la Unión Europea, en pleno barrio europeo de la capital belga, tras comprobar que el artefacto sospechoso que había suscitado la alerta era una simple bolsa de basura.

'Era un simple contenedor de basura, con desperdicios dentro', confirmó a Efe una portavoz de la policía de Bruselas Capital.

Parte del personal del Consejo de la UE había sido evacuado esta mañana por las fuerzas de seguridad ya que, según explicó un agente de policía a Efe, se había producido una alerta de bomba motivada por un 'paquete sospechoso' localizado en las inmediaciones de la calle Froissart, donde se encuentra la entrada que habitualmente utilizan los líderes y ministros europeos.

'Evaluamos constantemente las amenazas y actuamos en consecuencia'

Además de acordonar la calle, la Policía también evacuó a los ocupantes de otros edificios circundantes y a los cuidadores y niños de una guardería cercana, y cerró la estación subterránea de metro y tren de Schuman, según informó la agencia Belga.

Tras quedar el área evacuada, los servicios especiales de la policía llegaron al lugar, analizaron el paquete sospechoso y descartaron finalmente que se tratase de una amenaza.

El portavoz de Relaciones Interinstitucionales y Administración de la Comisión Europea, Antony Gravili, afirmó durante la rueda de prensa diaria del Ejecutivo comunitario que, a pesar de que la Comisión y el Consejo cuentan con sus propios procedimientos de seguridad, se mantienen en contacto permanente para evaluar acontecimientos como el acaecido hoy.

Y añadió que, tanto la CE como el Consejo, 'estamos evaluando constantemente las amenazas de seguridad y actuando en consecuencia'.