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Los delitos de la prensa de Murdoch salpican a Cameron

Los periodistas accedieron al contenido de los móviles de familiares de víctimas de los atentados de Londres

 

IÑIGO SÁENZ DE UGARTE

David Cameron creía que ya había pasado lo peor en el escándalo del News of The World con la dimisión del director de comunicación de Downing Street, Andy Coulson. No podía estar más equivocado. Nuevas y aún más impactantes revelaciones sobre los pinchazos de los buzones de voz de los teléfonos móviles por el periódico sensacionalista han dado munición de sobra a la oposición laborista y han dejado patente el muy probable trato de favor concedido a los medios de comunicación del grupo empresarial de Rupert Murdoch.

En un principio, fueron políticos y artistas las víctimas de los trucos sucios, e ilegales, de la prensa tabloide. Lo que se ha conocido ahora es mucho peor. Los periodistas del NOTW accedieron a las comunicaciones privadas de familiares de víctimas de los atentados del 7-J de 2005 en Londres. Lo mismo ocurrió con los padres de dos niñas asesinadas en 2002.

«Lo que ha ocurrido es asqueroso», dice en el Parlamento el primer ministro

A ello se suma el caso de Milly Dowler, de 13 años, también asesinada en 2002. Los periodistas pudieron acceder a los mensajes dejados por sus padres en el buzón del móvil tras la desaparición de la niña. Cuando este se llenó, los borraron para poder seguir utilizando ese recurso. Con eso, hicieron creer a los padres y la Policía que Milly estaba aún viva y utilizando el móvil.

Una cosa es conculcar la privacidad de una actriz. Otra muy diferente, dificultar el trabajo de la Policía y dar falsas esperanzas a unos padres que temen que su hija, como así fue, haya sido asesinada.

'Lo que ha ocurrido es completamente asqueroso', dijo el primer ministro ayer en el Parlamento. 'Creo que todos en esta Cámara y en todo el país consideran repulsivo lo que han leído' sobre el caso.

El Gobierno anuncia una investigación independiente a las 24 horas de negarla

Cameron anunció que habrá una investigación independiente, quizá dirigida por un juez, para examinar el trabajo de los periodistas implicados y de la Policía. Sólo 24 horas antes, el Gobierno se había negado a dar ese paso por haber ya en marcha una investigación policial.

El Gobierno tiene abiertos dos frentes. Uno ya está neutralizado, porque Andy Coulson, exdirector del NOTW y también uno de los arquitectos de la campaña electoral de los conservadores, dimitió como principal asesor de Cameron al saberse en enero que no se trataba de un caso aislado.

Pero Cameron sangra por otra herida. El Gobierno ha dado luz verde a la empresa de Murdoch, News Corporation, para lanzar una OPA sobre el total de las acciones de BSkyB, la mayor empresa televisiva del Reino Unido (6.000 millones de euros de ingresos anuales y diez millones de suscriptores a la televisión de pago). Murdoch controla la gestión y el 39% de sus acciones.

La oposición denuncia el trato de favor del Gobierno al grupo de Murdoch

Varios diputados de la oposición y la mayoría de los medios han acusado al Gobierno de dar un trato de favor a News Corporation al no considerar el riesgo para la concentración que supone la OPA.

Cameron afirma que se trata de dos casos sin relación y que el escándalo del NOTW no debe afectar a la OPA de BSkyB. Pero como dijo el diputado laborista TomWatson, delitos como los denunciados impedirían a alguien recibir la concesión de una licencia de taxi, mientras que la empresa de Murdoch va a ganar millones de libras a pesar de haber violado la ley en repetidas ocasiones.

La actuación de la Policía y sus relaciones con la prensa de Murdoch también serán objeto de la investigación. Los agentes detuvieron a un periodista del NOTW y a un detective privado en 2006 y dieron por cerrado el caso con sospechosa rapidez.

Scotland Yard no tenía muchas ganas de enfrentarse al poderoso grupo de comunicación, que ha reconocido que pagó a policías para acceder a informacionesconfidenciales.

Algunos de los hechos denunciados ocurrieron cuando Rebekah Brooks era directora del NOTW. Luego lo fue de The Sun y ahora es la principal responsable de la división de prensa del grupo de Murdoch. Cameron es amigo personal de Brooks, y por ahí también tiene un flanco abierto a las críticas.

Rupert Murdoch hizo público ayer por la tarde un comunicado en el que califica de 'deplorables e inaceptables' los hechos denunciados. Promete colaborar con la investigación, pero confirma su confianza en Brooks, cuya dimisión han solicitado medios de comunicación y varios diputados.

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