El califato del grupo terrorista Estado Islámico (EI) ha sido eliminado tras los combates en Al Baguz, su último reducto en el este de Siria, ha informado este viernes la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders.

Sanders ha comunicado la noticia a los periodistas que acompañaban al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en el avión presidencial en su viaje a Florida, donde tiene previsto reunirse con los líderes de Bahamas, Santa Lucía, Jamaica, Haití y República Dominicana. Al tomar tierra, el propio Trump, que se había reunido durante el vuelo con el secretario de Defensa de EE.UU., Patrick Shanahan, se dirigió a los periodistas para confirmar la noticia.

Por su parte, el portavoz de las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), Mustafa Bali, ha afirmado que un grupo de combatientes aún resiste, pero sin dominar el territorio. "La declaración de la Casa Blanca no contradice nuestras declaraciones. También decimos que el Estado Islámico ha caído", ha afirmado. 

Al igual que hizo hace dos días, Trump volvió a mostrar dos mapas de Siria: uno de cuando tomó posesión del cargo, en enero de 2017, en el que aparece marcado en rojo una gran parte del territorio sirio, que estaba entonces controlado por el EI, y un segundo, de este viernes, en el que no se aprecia ninguna marca."Aquí está el EI, y esto es lo que tenemos ahora", dijo Trump mientras enseñaba los documentos.

En un principio, la Casa Blanca informó de que la confirmación de la victoria procedía del canal Fox News, que tiene periodistas sobre el terreno, pero minutos más tarde Sanders señaló que habían recibido una llamada del Departamento de Defensa ratificando la noticia.

El Estado Islámico resiste en el Sahel

La caída del último feudo del grupo terrorista en Siria no significa la derrota del yihadismo ya que se ha hecho fuerte en la región del Sahel, y muy especialmente en Mali y Nigeria, donde los atentados son casi diarios y ponen en duda el control de los respectivos estados.

El director del Centro Kurdo de Estudios, Nawaf Khalil, ha explicado que la eliminación del EI del norte de Siria y su derrota en la batalla de Baguz no significa su fin.

Recordó que la organización terrorista, que ha luchado en Siria con combatientes de hasta 48 nacionalidades, muchos de ellos huidos a destinos desconocido, buscará estados frágiles, como en el Sahel y el Cuerno de África (casos de Mali y Somalia), para demostrar que todavía puede resistir.