El entrenador de fútbol americano Jerry Sandusky fue condenado este martes a entre 30 y 60 años de prisión por abuso sexual sobre al menos diez niños.

Ya en junio pasado, un jurado en Bellefonte (Pensilvania) había hallado culpable a Sandusky, ayudante del célebre entrenador Joe Paterno en la Universidad Penn State, de 45 de los 48 cargos que pesaban contra él por agredir sexualmente a 10 niños entre 1994 y 2008.

Los testigos presentados por la acusación aseguraron entonces que Sandusky utilizaba una organización de caridad que fundó para niños con problemas como 'su coto de caza personal' para encontrar víctimas de sus abusos.

Ocho de los menores que denunciaron abusos testificaron en el juicio que fueron víctimas de caricias y sexo oral y anal por parte del entrenador.

Uno de los testigos más relevantes de la fiscalía, el ex ayudante graduado Mike McQueary, declaró en el juicio que vio a Sandusky violar a un chico en una de las duchas de los vestuarios. Sandusky siempre ha mantenido su inocencia y se propone apelar la condena.

El juez John Cleland le condenó a entre 30 y 60 años de prisión por la ley de Pensilvania, que establece que Sandusky no puede ser puesto en libertad condicional antes de que termine el plazo mínimo de condena, lo que, dada su edad, se convierte de facto en cadena perpetua.

Un informe independiente publicado en julio reveló que algunos de los máximos responsables de la Universidad Penn State conocieron y ocultaron durante años los abusos sexuales contra alumnos cometidos en el equipo de fútbol americano, incluido el propio Paterno, que falleció el enero pasado.