CARACAS.- Las fuerzas antidisturbios bloquearon y disolvieron este miércoles una manifestación opositora en Caracas que reclamaba un referéndum revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro. Las protestas, en algunos casos violentas, con imágenes de policías lanzando gases lacrimógenos y de manifestantes agrediendo a agentes, se saldaron con siete detenidos. 

"Buscamos llegar al CNE (Consejo Nacional Electoral) para exigir una respuesta, un cronograma, las fechas de validar firmas para activar el referéndum", dijo a Sputnik Nóvosti el manifestante Ernesto González, un empleado de comercio de 37 años. Como González, centenares de manifestantes en grupos escasamente coordinados trataron durante horas de avanzar desde Plaza Venezuela, un céntrico nudo vial, hacia el casco histórico de la ciudad, donde está la sede del CNE, pero efectivos policiales y militares bloquearon los accesos.

El metro de Caracas cerró 14 de sus estaciones y suspendió el servicio de autobuses que las conecta, lo que impidió el desplazamiento hacia el área de Plaza Venezuela. "No vamos a permitir el ingreso al centro de la ciudad de la derecha que promueve la violencia", había advertido Jorge Rodríguez, alcalde oficialista del municipio Libertador, el mayor de la urbe.

 

Cuando se hizo evidente que los manifestantes quedarían bloqueados, uno de los portavoces del CNE, Luis Rondón, se presentó ante la protesta para escuchar las peticiones de los manifestantes. Rondón recibió un texto que pedía fijar fechas y puntos para validar las firmas que solicitaron iniciar el proceso revocatorio contra Maduro.

El Gobierno acusa a figuras políticas opositoras de "financiar" la violencia durante las protestas

Henry Ramos, el opositor que preside la Asamblea Nacional, y Henrique Capriles, dos veces candidato presidencial de la oposición, fueron los que entregaron el documento a Rondón. "El referéndum revocatorio puede y debe hacerse este año. Hemos planteado un camino y demostrado que no queremos violencia. Y esto apenas empieza", dijo Capriles a los periodistas que cubrían la protesta. Por su parte, Ramos dijo que "volvemos pacíficamente a las calles para exigir al poder electoral, al Tribunal Supremo y a la Fuerza Armada que no sean cómplices. Buscamos una salida democrática, constitucional y electoral a esta crisis".

Sin embargo, según el Gobierno, la violencia que se vio en las calles de Caracas fue "financiada" por figuras políticas opositoras. En concreto, el diputado oficialista de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, basándose en la rpesunta confesión de uno de los siete detenidos de las protestas, acusó al jefe de seguridad personal del propio Henry Ramos de contratar a los responsables de la agresión, recogida en un vídeo, a una agente antidisturbios
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Al menos dos de los siete detenidos, según Telesur, estarían involucrados en la agresión a la policía. "Estos sujetos están vinculados a organizaciones violentas con fines políticos, muchos de ellos son reincidentes en la agenda de violencia que varias figuras políticas financian para perturbar la paz del pueblo como lo hicieron en 2014", indicó el ministro del Interior, Justicia y Paz, Gustavo González López, en referencia a las manifestaciones violentas de hace dos años que causaron más de 40 muertos.

El ministro repitió sus críticas a la "ultraderecha venezolana", a la que culpó de llevar a cabo "acciones violentas alejadas de la vía democrática". Los detenidos habían, según denuncia González López, "atacado residencias estudiantiles" y "cometido una brutal agresión contra una funcionaria de la Policía Nacional Bolivariana". El titular de la cartera de Interior también acusó a los "cabecillas políticos" de estar detrás de la captación de jóvenes para "promover el odio" hacia el Comité Nacional Electoral y hacia las mujeres que dirigen el organismo.

Además de la manifestación en Caracas, en una veintena de ciudades del interior también hubo marchas o actos para exigir que el proceso revocatorio contra Maduro se ponga en marcha cuanto antes. En las ciudades de Mérida (suroeste) y Valencia (centro) también se registraron enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas del orden. Si un referéndum acabara con el mandato de Maduro este año, se elegiría un nuevo presidente, pero si el proceso se produjera en 2017 ó 2018 entonces el vicepresidente designado por el mandatario completará el período sexenal, hasta enero de 2019.