La oposición tailandesa mostró este sábado su cara más violenta al atacar a un grupo de policías en las proximidades de uno de los aeropuertos que controlan en Bangkok. La violencia de los manifestantes obligaron a los agentes a retirarse del puesto de control que habían establecido para evitar la llegada de más opositores a los aeropuertos que mantienen bloqueados desde el martes.

Los manifestantes, provistos de barras de hierro, palos de golf y de madera, retuvieron a un policía y golpearon a varios agentes. Los partidarios de la Alianza del Pueblo para la Democracia (monarquicos) exigen la dimisión del primer ministro Somchai Wongsawat.

En un intento de impedir que más tailandeses se unieran a la protesta en el aeropueto internacional Suvarnabhumi, la Policía montó controles de seguridad a unos dos kilómetros de la moderna terminal, donde varios miles de personas acampan con televisores portátiles, aparatos de música, sillas, mantas extendidas sobre el suelo, mientras que voluntarios de la Alianza distribuyen comida y bebida.

La Autoridad de Aeropuertos de Tailandia informó que el aeropuerto de Suvarnabhumi, por el que pasan a diario unos 150.000 viajeros, permanecerá cerrado por lo menos hasta el próximo lunes.

Desde que se produjo el cierre de los dos aeropuertos, más de 100.000 pasajeros han perdido sus vuelos desde Bangkok a destinos internacionales y de Tailandia. Esa cifra se aproximará a los 300.000 en las próximas 24 horas, indicó el ministro tailandés de Turismo, Weerasak Kowsurat.

En el viejo aeropuerto de Don Muang, a unos 30 kilómetros al norte de la capital y también en poder de la Alianza, un grupo de manifestantes atacó a una sargento de la Policía que fue capturada cuando intentó infiltrarse en la concentración, según informó la televisión local.

'Vamos a dar un segundo aviso a los manifestantes para que abandonen los dos aeropuertos. El lenguaje del aviso será más duro que el empleado en el primero', explicó a los periodistas el portavoz policial Amnuay Nimmano.

La explosión de una granada en la residencia oficial del primer ministro dejó 34 manifestantes heridos según informó un portavoz del grupo opositor. La residencia permanece ocupada por los manifestantes y han obligado al primer ministro a huir al norte del país.

El primer ministro Wongsawat, que ha instalado temporalmente la sede gubernamental en Chiang Mai, a unos 600 kilómetros al norte de Bangkok y plaza fuerte de su Partido del Poder del Pueblo, declaró el pasado día 27 el estado de excepción en Suvarnabhumi y Don Muang.