Una de los detenidas en la operación contra el frente de 'makos' (cárceles) de la banda terrorista ETA, Asier Aranguren Urroz, protagonizó la película Asier ETA Biok (Asier y yo), que fue premiada en la última edición del Festival de Cine de San Sebastián, celebrada en septiembre de 2013. La cinta relata la amistad entre el etarra, que cumplió ocho de años de cárcel por su pertenencia a la organización terrorista, y el director, Aitor Merino, que compartió pupitre con el terrorista en la ikastola de Pamplona en la que ambos estudiaron. La película fue exhibida en la sección Zinemira del festival donostiarra y reconocida con el Premio Irizar al Cine Vasco, que el director dedicó a su amigo.

Aranguren fue arrestado el 9 de mayo de 2003 en Saintes (Francia) junto a la entonces jefa de los comandos de ETA, Ainhoa García Montero y otros cuatro integrantes de los denominados 'taldes de reserva'. Natural de Pamplona y de 40 años, era un miembro huido del 'comando Urbasa', desarticulado en febrero de 2002, que asesinó en julio del año anterior al edil de UPN en Leitza (Navarra) José Javier Múgica.

Otra de las detenidas, Aitziber Sagarminaga, ha sido identificada como la persona que alquiló la pasada semana el café-teatro de Durango (Bizkaia) en el que se celebró el acto del colectivo de presos de la organización, EPPK, en el que participaron más de 60 presos excarcelados tras la anulación de la aplicación retroactiva de la doctrina Parot, según los datos recopilados por Europa Press.

Sagarminaga, actuaba como interlocutora del colectivo. Se encontraba en libertad desde noviembre de 1999, cuando abandonó la prisión de Foncalent (Alicante) tras cumplir cinco años por colaboración con la banda.

Entre los arrestados se encuentra también José Luis Campo Barandiarán, alias Fabrice y Atila, a quien se atribuyen las mismas labores de interlocución que a Sagarminaga. La Justicia francesa le condenó el 17 de diciembre de 2008 a diez años de cárcel como miembro del 'aparato logístico'. Nacido en San Sebastián, huyó a Francia en 1982 donde se encargó, junto con otros miembros de la banda, del alquiler de las viviendas que posteriormente eran ocupadas por miembros de la organización que estaban a la espera de integrarse en los comandos operativos que actúan en el interior. Aparte de gestionar estos alquileres con documentación falsa, era también el responsable de los etarras que se ocultaban en las citadas viviendas y de mantener su cobertura.

Otro de los detenidos es Egoitz López de la Calle Uribarri, de 34 años, arrestado en junio de 2001 en la localidad alavesa de Ochandiano, acusado de participar en varios actos de violencia callejera atribuidas a la ilegalizada Haika. Fue condenado a tres años y medio de cárcel por la Audiencia Nacional como miembro de esta organización aunque el Supremo le absolvió en enero de 2007.

Miren Aintzcune Orkolaga Etxaniz, por su parte, se encuentra en libertad desde el 26 de septiembre de 2009 después de cumplir casi nueve años de condena en Francia como integrante de ETA. Antes de su liberación, llevó a cabo una huelga de hambre de 17 días para impedir que las autoridades galas la entregasen a la Policía española.

Por su parte, Mikel Almandoz Erviti fue detenido en Pau el 9 de diciembre de 2003 y fue condenado a 12 años de cárcel en Francia aunque el septiembre de 2012 quedó en libertad condicional. Miembro 'legal' (no fichado por la Policía) de ETA, fue arrestado junto al entonces jefe de los 'comandos', Gorka Palacios Alday, y sus lugartenientes Juan Luis Rubenach e Iñigo Vallejo Franco. Los cuatro miembros de la cúpula etarra fueron arrestados cuando celebraban una reunión para asignar nuevos atentados y evaluar las consecuencias de la captura tres días antes de Ibón Fernández Iradi, 'Súsper'.