MADRID.— En plena tormenta por el Caso Imelsa y con Rita Barberá cercada por las sospechas de corrupción, Alberto Fabra, expresidente de la Comunidad Valenciana y del PP de la Comunitat Valenciana, ha instado a la exalcaldesa de Valencia y senadora a dar explicaciones y renunciar a su puesto en el Senado, algo a lo que se niega la propia Barberá. "Ella es una persona con mucha experiencia y sabe qué tiene que hacer para que el partido no se sienta incómodo en ningún momento", ha dicho Fabra sobre Barberá.

En declaraciones a la Cadena Ser, Fabra ha apelado "a su sensibilidad para saber lo que tiene que hacer", reiterando así el llamamiento que le dirigió el martes en los pasillos del Senado.

Fabra se ha pronunciado así sobre la conveniencia de que la exalcaldesa deje su acta de senadora y ha recalcado que "tiene la suficiente experiencia para saber lo que tiene que hacer. No obstante, ha admitido que "la decisión tiene que ser suya".

Además, ha negado que la decisión del PP de mantenerla como suplente en la Diputación Permanente pretenda mantener a Barberá como aforada —los senadores deben ser juzgados por el Tribunal Supremo— en caso de que se disolviesen las Cortes para convocar nuevas elecciones.

En su opinión, se trata más bien de mantener la situación que ya tenía, y no de darle un "aforamiento adicional" puesto que, según ha explicado, Barberá es senadora por designación autonómica y seguiría aforada aunque se disolviesen las Cortes.

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Fabra ha dejado claro que él cree en la presunción de inocencia pero considera que Barberá tiene que dar explicaciones "contundentes y convincentes", porque si no es difícil que la gente pueda creer que "no supiera nada" de lo que estaba sucediendo "en su entorno más próximo".

Barberá no ha sido llamada a declarar ni está investigada en la Operación Taula, que ha destapado una red de comisiones en torno a la empresa Imelsa y sospechas de blanqueo en el Grupo Municipal del PP en Valencia, investigado prácticamente en su totalidad.

Fabra ha asegurado que él siempre actuó con "contundencia" cuando tuvo conocimiento de casos de corrupción en su etapa al frente del PPCV aunque se encontró con resistencias quienes no entendían que él exigiese responsabilidades cuando alguien resultaba imputado y no, como decían los Estatutos, una vez que era condenado con sentencia firme.

"Ahora entiendo por qué, porque les afectaría directamente a ellos en el futuro", ha opinado. Preguntado si encontró resistencias o apoyo en el PP nacional para combatir la corrupción en Valencia, ha respondido: "Nadie me dijo adelante, pero nadie me dijo para".