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Barça - Madrid Unos 3.000 efectivos de Mossos d'Esquadra y seguridad privada velarán por el Clásico

El conseller de Interior de la Generalitat, Miquel Buch, y el comisario jefe de los Mossos d'Esquadra, Eduard Sallent, han garantizado la celebración del partido a pesar de la concentración convocada por Tsunami Democràtic.

Agentes de los Mossos d'Esquadra controlan a los simpatizantes independentistas en el aeropuerto de Barcelona. EFE/Alejandro García

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Unos 1.000 mossos d'Esquadra garantizarán la seguridad del entorno del Camp Nou y de la celebración del Clásico entre el FC Barcelona y el Real Madrid, en un dispositivo de seguridad que en total contará con 3.000 efectivos, incluyendo a la seguridad privada del club blaugrana.

Así lo han explicado en una rueda de prensa el conseller de Interior de la Generalitat, Miquel Buch, y el comisario jefe de los Mossos d'Esquadra, Eduard Sallent, que han garantizado la celebración del partido y que actuarán ante cualquier eventualidad, además de puntualizar que se trata de un dispositivo ligeramente superior al habitual.

Ha indicado que el dispositivo tendrá dos fases: en la primera se establecerá un cordón de seguridad a partir de la mañana del 18 de diciembre con filtros y controles, y que garantizará el acceso al partido de los jugadores y árbitros, y la segunda se centrará en el acceso del público y el partido en sí.

El "peor escenario": la invasión del Camp Nou

"Uno de los escenarios más complejos sería una invasión del campo, una situación extrema que no contemplamos como probable pero sí posible", ha indicado Sallent, que ha destacado que los Mossos, que coordinan el dispositivo, han diseñado medidas para dar respuesta a esta eventualidad, en la que sería la seguridad privada del club azulgrana la que debería intervenir inicialmente para "recuperar la normal situación" en el terreno de juego.

Los Mossos intervendrían en el interior del estadio si la situación se volviese "especialmente grave", según Sallent, que ha destacado que han mantenido una fluida comunicación con los responsables de seguridad del FC Barcelona, del Real Madrid, de la Liga y de la Federación Española de Fútbol -en este caso sobre la seguridad de la comitiva arbitral-.

El dispositivo de seguridad para el clásico, un partido de alto riesgo en el que se extreman las medidas de seguridad ante la alerta antiterrorista, se ha diseñado en esta ocasión también en función de la convocatoria de Tsunami Democràtic, para poder dar una respuesta "rápida y adecuada" en función de los distintos escenarios en los que están trabajando. "Nuestra obligación es contemplar todas las hipótesis", ha reconocido el jefe de los Mossos.

El dispositivo

Sallent ha detallado que en una primera fase, desde primera hora de la mañana, se protegerán con un cordón policial los alrededores del Camp Nou, especialmente en la zona norte, creando un perímetro para garantizar la movilidad hacia el estadio de jugadores y árbitros. "No será una zona blindada", ha matizado Sallent, que ha precisado que el cordón tendrá "porosidad", para que se pueda franquear en casos en que esté justificado.

Cuando se acerque el inicio del partido, que arrancará a las 20.00 horas, el cordón se centrará en los accesos del estadio barcelonista, para garantizar el acceso del público e impedir que "haya algún tipo de enfrentamiento entre personas con ideología opuesta" y también para evitar que la convocatoria de Tsunami "impida el normal acceso a las personas que van a ver el partido".

Por este motivo, los Mossos d'Esquadra, impedirán que los activistas de Tsunami que se hayan concentrado en los cuatro puntos en los que la plataforma ha citado a sus seguidores se acerquen a los acceso al estadio.

Para entrar al campo, los aficionados notarán una "mayor intensidad" en los controles y registros, por lo que los Mossos d'Esquadra recomiendan a los espectadores que acudan con una mayor antelación de lo habitual y que utilicen el metro o vayan a pie.

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