Público
Público

Caixabank El juez imputa a Caixabank por blanquear capitales de la mafia china

El juez Ismael Moreno considera que las oficinas investigadas, directivos y empleados actuaron presuntamente "como canales de blanqueo de dichas organizaciones"

El logo de Caixabank en una de sus oficinas.

AGENCIAS

El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha dirigido procedimiento como investigada contra Caixabank por un delito de blanqueo de capitales por la actuación de diez de sus sucursales cercanas al polígono Cobo Calleja, en Fuenlabrada, en el presunto favorecimiento, auxilio y ocultación de fondos de clientes de nacionalidad china, investigados en las operaciones contra la mafia china conocidas como Emperador, Chequia, Snake y Pólvora.

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 2 considera que las oficinas investigadas, directivos y empleados actuaron presuntamente "como canales de blanqueo de dichas organizaciones", aún cuando podían sospechar que sus clientes estaban inmersos en actividades ilícitas de fraude del que procedían las ingentes imposiciones en efectivo que realizaban".

En su auto, el magistrado explica que los directores de las sucursales implicados permitieron, entre otras cosas, que los miembros de las tramas usaran testaferros y DNI falsos, hicieran ingresos en efectivo con facturas falsas para eludir a Hacienda y tampoco advirtieron de que sus empresas tenían una actividad sospechosa.

Consultadas por Efe, fuentes de CaixaBank han negado cualquier tipo de colaboración en este supuesto lavado de dinero y han defendido que en la entidad existe una cultura de cumplimiento normativo con empleados formados que tienen la obligación de seguir las normas antiblanqueo.

"CaixaBank niega cualquier tipo de colaboración o participación en delitos de blanqueo de capitales presuntamente cometidos por ciudadanos de nacionalidad china", dijo un portavoz de la entidad en un email enviado a Reuters.

El juez, que ha citado a un representante legal de la entidad el 26 de abril para tomarle declaración, basa su investigación en sendos informes de la UCO y el Sepblac, que describen "una renuente falta de control y de reacción apropiada" por parte del órgano antiblanqueo de CaixaBank en las sucursales cercanas al polígono y también de la zona del Rastro madrileño.

Hay "indicios claros", dice, de que la entidad permitió el lavado a través de "masivas operaciones" que introducían en el circuito bancario "millones de euros en efectivo" que luego se transferían a China y Hong Kong. Esto se hacía con operativas que "ayudaban" a que las transacciones "pasaran desapercibidas" al Banco de España y al Sepblac.

Este órgano de inteligencia financiera cifró en 99,1 millones las transferencias totales enviadas a China y Hong Kong en el periodo investigado, de 2013 a 2015, pero CaixaBank solo comunicó indicios de blanqueo en 2 de los 193 clientes que hicieron estas operaciones. De este dinero, 41,6 millones fueron transferencias ordenadas por personas vinculadas a la trama Emperador liderada por Gao Ping y que investiga también la Audiencia Nacional.

Según el juez, la investigación parte por un lado de la causa contra la filial en España del banco chino ICBC por blanqueo que lleva la Audiencia Nacional y, por otro, de los casos contra tramas chinas como Emperador o Snake. En estas últimas investigaciones, los tribunales requirieron información a CaixaBank y otras entidades en las que los miembros de las redes tenían cuentas.

Fue advertido por el Banco de España

Las sucursales implicadas de Caixabank, que "se prestaron a ser canales de blanqueo de dicha organización y otras que se están identificando", hicieron "caso omiso" a estas peticiones. "Frente a esta pasividad de CaixaBank, 18 entidades financieras ante el mismo comportamiento emitieron las comunicaciones debidas y cancelaron las cuentas", destaca el auto. Tras estas peticiones de la Audiencia Nacional, CaixaBank no realizo "exámenes especiales" ni comunicó nada al Sepblac "respecto a 165 de los 193 clientes, sino que siguieron operando, transfiriendo 31,7 millones de euros", añade el juez.

El incumplimiento de CaixaBank, dice Moreno, fue "contumaz y no episódico", ya que recibió una primera advertencia del Banco de España en 2013 y en 2015 hizo una auditoría interna con recomendaciones "insuficientes" respecto a tres de estas sucursales, un informe que se envió a la "alta dirección del banco" y que apreció indicios de blanqueo en 82 sociedades y 8 personas.

Los órganos antiblanqueo de CaixaBank no estaban dotados, dice el juez, "de personal ni entrenados para ser eficaces", unos fallos "graves" conocidos por "todo el personal directivo" de la entidad, sobre todo por el entonces responsable de cumplimiento normativo.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias