El líder del PP, Pablo Casado, convencido de que las cuentas públicas van en contra de la unidad de España al ceder a los intereses de los independentistas, ha centrado su intervención del debate sobre los Presupuestos Generales del Estado (PGE) en Catalunya y ha aprovechado su intervención para cuestionar la imparcialidad de los jueces catalanes.

El dirigente 'popular' ha reivindicado el papel de su partido, que recurrió el Estatut de Catalunya y, por ello, el juicio vinculado al referéndum independentista del 1-O está teniendo lugar en el Tribunal Supremo y no en el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) "con magistrados nombrados por los partidos independentisas", ha afirmado. 

El conservador ha rechazado unilateralmente el diálogo con el Ejecutivo catalán: "No se puede dialogar con los presos independentistas. ¿Dialogar con quién y sobre qué?" "El único diálogo que cabe es sobre cuándo y cómo se aplica el 155”, ha aseverado y ha tildado el procés como "el peor golpe de Estado en la democracia desde el 23-F".

A juicio de Casado, a Sánchez "le da igual lo que digan" los demás y le ha acusado de ser "un zombie". "A Sánchez, como el clásico de Horacio, se aplaude mientras el pueblo le silva. A él le da igual lo que le digan porque todos son fachas, a él le da igual los editoriales de los periódicos porque están todos comprados, a él le da igual lo que resista la sociedad española porque él tiene un manual de resistencia".

Sobre los PGE, Casado ha afirmado que defender un proyecto de presupuestos que "ya están heridos de muerte es cómo vender un pescado que ya empieza a oler mal". En la contraréplica a la ministra Montero, el líder del PP ha subrayado que el Partido Popular será "la contención al chantaje independentista y a la cesión de los socialistas".

Albert Rivera pide a PP y PSOE que vuelvan "al siglo XXI"

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, durante el debate de totalidad de los presupuestos este martes en el pleno del Congreso. EFE/Juan Carlos Hidalgo

Por su parte, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, también ha utilizado su intervención para hablar sobre la cuestión catalana a pesar de comenzar su intervención con: "Yo hoy quiero hablar de los Presupuestos, toca hablar de los españoles". Al respecto de las cuentas del Ejecutivo, Ciudadanos -que ya adelantó hace meses su voto en contra- ha cargado contra la alianza de "sanchistas, independentistas y populistas" y ha reivindicado un gobierno "constitucionalista".

El catalán ha acusado a la ministra Montero de hablar de Catalunya de oídas. "El conflicto es que te pinten las persianas de tu casa como a los judíos", ha señalado Rivera, que criticado a la socialista por "llevar a un diputado de Esquerra Republicana dentro" y ha pedido a Pedro Sánchez "escuchar a más gente como Alfonso Guerra y menos a Adriana Lastra".

El presidente de la formación naranja ha señalado al Ejecutivo que su posición con los independentistas "les va a pasar factura" y que "se han equivocado". Rivera también ha cargado contra los socialistas por, a su juicio, llamar "'facha' a todo aquel que lleva una bandera de este país". 

Rivera, en tono presidencialista y ante una inminente convocatoria de elecciones -si los presupuestos no salen adelante en la votación del miércoles-, ha apelado a "liderar una nueva etapa donde el bipartidismo no pueda pastelear" y ha pedido a PP y PSOE que vuelvan "al siglo XXI".  "Franco y la ley del aborto, eso ya está superado", ha aseverado.

La ministra Montero - que le ha llamado por error Casado en varias ocasiones- le ha recriminado sus "ansias" de llegar a la presidencia del Gobierno. Rivera, en su segunda intervención, ha empleado un tono más duro contra el PSOE: "A mí lo que me avergüenza es que sus líderes políticos brinden con Otegi, eso sí me da vergüenza", y ha finalizado pidiendo la convocatoria de elecciones.