Urdangarin ya está en la cárcel. El cuñado del rey tenía de plazo hasta este lunes para elegir la prisión en la que cumplirá la condena de cinco años y diez meses por el caso Nóos. El exduque ha ingresado en la cárcel de Brieva, un centro penitenciario de mujeres que dispone de un módulo complementario en el que estará solo. En él estuvo encarcelado, también solitario, el exdirector general de la Guardia Civil Luis Roldán.

La prisión se encuentra a las afueras de Ávila, a unos siete kilómetros, aislada de núcleos urbanos. Construida en 1989, dispone de 162 celdas y otras 18 en el citado módulo complementario dentro de una superficie total construida de 43.540 metros cuadrados en una parcela de 98.484 metros cuadrados en total, según los datos del Ministerio del Interior.

El módulo en el que ingresará Urdangarin estaba vacío desde que lo abandonó Roldán en 2005 y ha sido remodelado en los últimos meses, con el cambio del sistema de calefacción y agua caliente, acondicionamiento de baños y la reparación de la cubierta del pabellón deportivo, informa Julia Pérez. De la misma forma que estará el exduque, en este módulo permaneció en solitario Luis Roldán, que en los años 90, tras su fuga y posterior detención, fue trasladado a Brieva porque contaba con mayor seguridad y podía ser vigilado de una manera más personal. 

Imagen de la cárcel de Brieva. - EFE

Por este módulo especial para hombres también han pasado algunos de los narcos arrepentidos de la Operación Nécora. El espacio, que da al patio interior de la cárcel, estará vigilado al menos por un funcionario, cuenta con una sala con una televisión -al igual que el resto de los módulos-, duchas, un pequeño patio y un pequeño despacho. Durante su estancia en Brieva, Urdangarin tendrá la posibilidad de llamar a diario a su familia, así como tener comunicaciones todas las semanas y un vis a vis al mes.

La etarra Idoia López Riaño, "La Tigresa", condenada por más de veinte asesinatos, o la que fuera teniente de alcalde de Marbella Isabel García Marcos, condenada por el caso Malaya, fueran otras inquilinas ilustres de esta pequeña prisión.

Sin embargo, aunque Urdangarin ha elegido dónde ingresar -la legislación lo permite- su ubicación definitiva depende ahora de Instituciones Penitenciarias que, en función de sus condiciones, decidirá dónde cumple condena y en qué grado penitenciario le clasifica. Instituciones dispone de un plazo de dos meses para decidir la ubicación definitiva de Urdangarin, en la prisión abulense o en otro centro penitenciario, así como el grado en el que se le clasifica, que podría incluso ser el tercer grado o régimen abierto.

La propuesta de la Junta de Tratamiento deberá señalar expresamente "los destinos, actividades, programas educativos, trabajo y actividades ocupacionales o de otro tipo que deba seguir el interno", de acuerdo con el artículo 103.3 del Reglamento Penitenciario. Cabe incluso la posibilidad de que se determine directamente que Urdangarin cumple las condiciones para ser clasificado en el tercer grado, que implica la "semilibertad", en el que los internos solo tienen que acudir a dormir al centro penitenciario, normalmente un Centro de Inserción Social (CIS) y no una cárcel como tal.

Existen antecedentes de presos a los que se les aplicó directamente el tercer grado penitenciario en la primera clasificación, uno de los más polémicos el del dirigente de Nuevas Generaciones del PP Ángel Carromero, condenado en Cuba a cuatro años de prisión por homicidio imprudente tras sufrir un accidente de tráfico en la isla en el que murieron los disidentes cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepero.