Josep Antoni Duran Lleida ha pedido perdón por lo ocurrido con el caso Pallerols, pero ha ratificado que no piensa dimitir en modo alguno.

'Pido perdón por lo que puedan haber hecho otras personas', ha dicho el presidente de UDC en una entrevista concedida a la cadena de televisión privada de Catalunya 8TV desde Santiago de Chile, en donde se encuentra de viaje hasta el próximo lunes.

Ha asegurado que ni él ni su partido, Unió Democrática de Catalunya, se han negado a dar la cara y que tiene la conciencia tranquila por unos hechos cometidos por otras personas en la más absoluta ignorancia de la dirección y en contra suya.

A mí no me obligarán a dimitir, ha dicho y repetido. 'No les pienso dar esa satisfacción'. Y para poner mayor énfasis ha recurrido a la siguiente expresión: 'Sería como si fuera cornudo y pagara la bebida'. Duran ha insistido en que no se ha demostrado la existencia de financiación irregular de Unió y en que no hay sentencia alguna sobre el caso.

También se ha quejado de la actitud del conjunto de fuerzas políticas y ha lamentado explícitamente las explicaciones que le exigen desde el PP, concretamente, María Dolores de Cospedal, a quien ha requerido que pida información a Enric Millo, excompañero de partido de Duran y actualmente diputado y portavoz del PP en Catalunya. Millo apareció implicado en el escándalo sobre la financiación ilegal de Unió Democràtica, con fondos europeos destinados a cursos de formación para desempleados. Duran ha explicado que Millo formaba parte entonces del ala más nacionalista de Unió, de la más radical, y que él mismo le dijo que lo apartaba de las listas de candidatos pora la relación que había tenido con el caso Pallerols.

Finalmente, Duran ha calificado de 'cacería' las exigencias de dimisión y las peticiones de depuración de responsabilidades que se le exigen desde diferentes ámbitos políticos y sociales.

Duran ya había dejado claro horas antes que no piensa presentar su dimisión pese a demostrarse que su partido se financió ilegalmente en los años 90. 'Por supuesto, no pienso dimitir. En su día el partido asumió responsabilidades políticas, expulsamos a quienes hoy están condenados o se dieron de baja voluntariamente y por otra parte abrimos una comisión investigadora, cosa que nadie ha hecho, con personas ajenas al partido', declaró al diario chileno La Tercera.

También explicó que lo que él dijo en el 2000 es que 'si hubiese habido una situación irregular' asumiría responsabilidades pero, pese a la sentencia condenatoria que han aceptado altos cargos de su partido, ha negado que eso haya ocurrido. 'No hay financiación irregular y las responsabilidades políticas ya fueron asumidas', ha añadido.

Además, ha criticado que los partidos de la oposición estén pidiendo su dimisión 'antes de conocer la sentencia' y ha afirmado rotundo que a Unió 'no se la ha acusado en absoluto de financiación irregular'. 'El fiscal dice claramente que en los hechos que sucedieron no teníamos noticia de ello, ni a los acuerdos que pudieran haber llegado los imputados, Unió Democrática no está imputada, ni condenada. Si usted tiene un piso y alguien está trabajando en su casa y deja el grifo abierto, usted no hace eso voluntariamente, ni tiene responsabilidad penal, claro tendrá que pagar, pero es una responsabilidad civil subsidiaria', subrayó.