Los parlamentarios de la Unión Europea adoptaron el miércoles una resolución en rechazaron los intentos de los diputados británicos de reconocer la postura proeuropea de Gibraltar en el Brexit, además marcaron las lineas rojas de la separación del Reino Unido y Europa.

En una muestra de la unidad de la UE, el texto repetía las mismas prioridades establecidas por Donald Tusk en el borrador que recogía las líneas de la negociación publicado la semana pasada.

El Parlamento Europeo desea que las conversaciones sobre la futura relación de Reino Unido con la UE comiencen solo después de que se haya realizado un "progreso considerable" sobre el proyecto de ley del Brexit, las fronteras con Irlanda y los derechos de los tres millones de ciudadanos de la UE que residen en Reino Unido y del millón de británicos residentes en los países de la UE.

El texto fue apoyado por más de dos tercios de los parlamentarios por lo que tendrán que aprobar un acuerdo con el Reino Unido.

El vicesecretario de estado británico para el Brexit, Robin Walker, dijo que este era un "movimiento positivo" aunque Reino Unido preferiría comenzar las negociaciones tan pronto como sea posible. También dijo a periodistas en la sesión en Estrasburgo que su país también pondrá primero los derechos de los ciudadanos en el proceso del Brexit.

Además, la resolución del Parlamento sugirió la posibilidad de que Reino Unido revierta el proceso del Brexit, subrayando, sin embargo, que esto solo sería posible con la aprobación de los 27 estados miembros.

En cuanto a Gibraltar, los parlamentarios rechazaron dos enmiendas casi idénticas que habrían añadido una referencia en el texto del voto proeuropeo de Gibraltar en el referéndum del Brexit, un movimiento que buscaba recordar el apoyo de sus residentes a la UE pero que también prefieren continuar siendo parte de Reino Unido.

El enclave británico al sur de la costa de España causó una fuerte controversia después de que el plan de Tusk diera a España el poder de decidir cual sería la relación entre Gibraltar y la UE después de que Reino Unido salga del bloque.

Gibraltar rechazó la idea de que Reino Unido compartiese su soberanía con España por un 99 por ciento de los votos frente a un 1 por ciento en un referéndum en 2002, pero votó abrumadoramente a favor de pertenecer en la UE en la votación del Brexit en junio.

Los cambios propuestos por los diputados conservadores británicos en el Parlamento de la UE y por un grupo de diputados de varios partidos querían resaltar que Gibraltar votó contra el Brexit.

También querían añadir una referencia al enclave en un párrafo diciendo que una mayoría de los votantes en Escocia e Irlanda del Norte votaron a favor de permanecer en la UE.