MADRID.- El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha destituido este martes al secretario de Organización del partido, Sergio Pascual, al considerar que "los últimos acontecimientos dan muestra de una gestión deficiente cuyas consecuencias han dañado gravemente a Podemos en un momento tan delicado como es el proceso de negociaciones para conformar un Gobierno del cambio".

Sergio Pascual, uno de los miembros de la dirección más próximos a Íñigo Errejón, mantendrá sus funciones como diputado en el Congreso, según ha confirmado el partido en un comunicado, donde agradece "el buen trabajo realizado". Pascual era el responsable de la gestión de los procesos internos territoriales del partido, que ha sufrido dimisiones en Madrid y crisis internas en Galicia y Euskadi.

A partir de ahora, sus competencias como secretario de Organización serán asumidas por el propio Pablo Iglesias hasta que tenga lugar el nombramiento de su sucesor por parte del Consejo Ciudadano Estatal.

La advertencia de Iglesias en su carta a la militancia

Antes de conocerse su destitución, Iglesias publicó por la tarde una carta a la militancia en la web del partido, titulada Defender la belleza, donde recuerda sus inicios ("Nacimos para cambiar el curso de la historia social y política"), su posición ante una formación de Gobierno ("Rajoy no creía que el PSOE se atrevería a gobernar con nosotros. Y, de momento, parece que los hechos le están dando la razón") y la "guerra de desgaste" a la que se enfrenta la formación morada, en forma de "financiación de gobiernos extranjeros, becas black o decenas de querellas que ocupan portadas en los medios pero que cuando se archivan apenas merecen atención", informa Ana Pardo de Vera.

Iglesias señala a su partido, militancia y Círculos que el "objetivo de esos sectores oligárquicos es evidente": el desgaste y el final de Podemos, atacando "aquello que nos diferencia del resto de actores: la unidad y la belleza de nuestro proyecto político". El líder de Podemos, en este sentido, menciona "las dimisiones en Madrid", asegurando que "se produjeron en el peor momento posible y han puesto en bandeja el relato que interesa a los defensores del statu quo. Iglesias garantiza que "deberán asumirse responsabilidades".

Iglesias, pues, materializa esa advertencia con la destitución de Pascual, cuya trascendencia ha sido reconocida por fuentes de la dirección de Podemos en declaraciones a la agencia Efe, así como el riesgo de que se siga alimentando el relato de la división interna en un momento histórico. Un riesgo que, a pesar de todo, han decidido asumir para evitar que sus "adversarios" aprovechen la crítica interna para debilitar al partido.

Sin embargo, el propio Iglesias negaba en la carta las diferencias internas, aunque advertía: "En Podemos no hay ni deberá haber corrientes ni facciones que compitan por el control de los aparatos y los recursos; pues eso nos convertiría en aquello que hemos combatido siempre: un partido más".

Tras conocer su destitución, Sergio Pascual ha reaccionado en su perfil en Twitter asegurando que se ha "dejado la piel construyendo organización y participación popular" durante dos años y continúa manteniendo que sigue "comprometido con el proyecto de mayorías para el cambio".