MADRID.- Consiguió lo que pocos en la pasada legislatura: sacar unas cuantas veces de sus casillas a Mariano Rajoy. También que la vicepresidenta del Congreso, Celia Villalobos, dejara de un bote su ocupación –fuera la que fuese- para socorrerlo durante el vahído que sufrió cuando intervenía en un Debate del Estado de la Nación.

Suecano de 57 años, profesor, corresponsal de Levante y alcalde de su pueblo, antes que diputado en el Congreso, el portavoz de Compromís confiesa que le está dando duro a la bicicleta para contrarrestar su hipertensión en estos días de infarto.

“Aunque va a ser difícil, terminarán en acuerdo”, pronostica optimista @JoanBaldoví en los 140 caracteres que –reconoce- comparte con un colaborador que de vez en cuando se la juega….

Es usted un presumido (lo digo por el cartelón de su actividad parlamentaria en su cuenta)

Tengo por norma no verme nunca ninguna intervención. Nunca, jamás. Solo mi mujer me dice si lo he hecho bien o mal. Eso debe de ser cosa de mi colaborador.

Pero vaya, que trabajó usted la pasada legislatura… como Cayetana Álvarez de Toledo.

Jaja. Yo sí trabajé. Aunque fuera simbólico porque todo se iba por el coladero de la mayoría absoluta. Pero estoy orgulloso de mi trabajo, sí.

¿Durante cuánto tiempo va a hacerlo en esta? ¿Cuánto le va a durar esta vez el escaño?

No creo que vaya a ser una legislatura muy larga. No llegaremos a los cuatro años. Probablemente sea corta, pero tiene que ser intensa.

Se tiene que notar de verdad que ha habido un cambio. Si no se nota, los ciudadanos se sentirán estafados.

Momento de la conversación a través de Twitter con el diputado de Compromís, Joan Baldoví.

¿Estaba usted informado del anuncio de propuesta de gobierno tripartito de Pablo Iglesias el pasado viernes?

No. Esperaba algún gesto aunque no la propuesta de gobierno, ministros incluidos. Fue una jugada inteligente la de situar la presión en el otro lado.

¿Les ha invitado Iglesias a ese eventual ejecutivo?

Nadie nos ha dicho nada aún. Estamos a la espera de que alguien nos llame. Cuando Pablo hacía su propuesta, los cuatro diputados de Compromís no estábamos incluidos.

¿Estaba por los pasillos del Congreso cuando ocurrió? ¿Se cruzó con algún colega socialista?

Aproveché para ir al barbero. No podía moverme y vi la rueda de prensa entera mientras me cortaban el pelo.

No me crucé con ningún socialista pero puedo imaginar la cara de sorpresa que se les debió de quedar.

Momento de la conversación a través de Twitter con el diputado de Compromís, Joan Baldoví.

¿Le ha llamado alguno para cerrar un acuerdo de investidura?

Solo hemos hablado con el PSOE sobre la constitución de los grupos. Mi relación con todos ellos ha sido muy cordial.

Y aunque creo que se han portado muy mal con nosotros en el tema de los grupos, ahora hay que ponerse a trabajar para que haya un cambio y, pronto, un gobierno.

O sea, que Compromís apoyaría una investidura de Pedro Sánchez ¿Con líneas rojas?

No ponemos líneas rojas aunque sí demandas de sentido común, que incluso los socialistas reivindican en Valencia, como es el sistema de financiación. No porque queramos tener más, sino porque queremos que sanidad y educación se puedan pagar.

Se tiene que reformar la financiación. Como se tienen que derogar, según acordamos todos la pasada legislatura, normas injustas como la LOMCE, la reforma laboral o la eléctrica.

Y hay que crear leyes que vayan en favor de la mayoría. Nosotros ya hemos firmado la 25 de Emergencia Social.

Pero la consulta de autodeterminación no es condición de Compromís para la investidura…

Para nosotros no, aunque debe quedar claro que yo, y Compromís, estamos a favor del derecho a decidir. Los problemas se resuelven votando, como nos enseñó Cameron hace menos de un año.

Momento de la conversación a través de Twitter con el diputado de Compromís, Joan Baldoví.

La semana pasada le regaló al rey Els Furs del Reino de Valencia, jurados por un Austria y abolidos por un Borbón. ¿Cuál era el mensaje?

Era un mensaje en clave valenciana. Sobre la esperanza de que, durante el reinado de Felipe VI, se pueda recuperar parte del Derecho Foral abolido por el primer Felipe de la casa Borbón, Felipe V. Porque hay que decir que, a veces, el derecho foral valenciano es mucho más moderno que el castellano.

No recuperar el Reino de Valencia…

Intento ser respetuoso pero soy poco monárquico. Prefiero repúblicas a reinos.

¿En qué bancada se va a sentar finalmente el diputado Baldoví?

El viernes decidimos, de forma unánime, que nos sentaremos en el Grupo Mixto. Teníamos opiniones diversas, pero al final pensamos que había que salir unidos. Todos renunciamos un poco en beneficio de los demás. Y ese es el ejemplo de lo que debería ocurrir con el gobierno.

En cualquier caso, en todos los temas que tengan que ver con la agenda valenciana, vamos a colaborar con nuestros compañeros del grupo confederal.

¿No hay cisma en Compromís, pues?

No. La decisión de la Ejecutiva fue unánime.

¿Y por qué la ruptura con Podemos?

Nosotros no rompimos. Nuestro protocolo electoral, a diferencia de las Mareas y En Comú, especificaba que llegaríamos hasta el final, que presentaríamos grupo para tener la oportunidad de pelearlo en los tribunales.

No rompimos. Hicimos lo que marcaba nuestro protocolo que también especificaba que, en caso de que no nos dieran el grupo, los diputados provenientes de Podemos podían adscribirse al grupo confederal.

Pero si finalmente se produjera un adelanto electoral, ¿repetirían candidatura conjunta con Podemos?

Fue una coalición que dio muy buen resultado, hicimos una buena campaña, nos complementamos, hemos hecho lazos de amistad y seguro, en esta legislatura, votaremos el 99% de las cosas igual.

Lo tendrían que decidir los órganos de dirección, pero fue una buena experiencia.

Es decir: que la separación del grupo tampoco va a tener consecuencias en el tripartito de Valencia.

Siempre es mejor sumar que dividir.

A Rajoy le sacó unas cuantas veces de sus casillas en el Parlamento, desde el mismo día de su investidura en 2011.

Y nunca lo he entendido porque soy una persona tranquila y afable. Pero me encantó sacarle de sus casillas.

Si volviera a someterse a la investidura, que no se ha descartado aún, ¿qué le diría hoy?

Tres cosas: que no lo voy a votar. Segundo: le refrescaría la memoria con todas las leyes y todas las promesas incumplidas de su anterior campaña electoral. Y tercero, un detalle: teníamos un duelo en OK Corral a ver quién ganaba en mi pueblo. Le recordaría que le he sacado 2000 votos más.

Tendrá usted la hipertensión a raya con los días que se avecinan...

Por eso hago mucho deporte. Cuando no estoy en el Congreso, cojo la bicicleta. Hoy en mi tierra, que es una tierra plana, de arroz, he estado dos horas pedaleando hasta la Albufera.

Su vahído fue el susto de la última legislatura ¿Se arrepintió entonces de haber dejado sus ocupaciones pasadas: la enseñanza, el periodismo…?

Lo pensé a la semana de que me eligieran alcalde. Y a veces lo sigo pensando. Pero la política es una pasión que me ha interesado desde niño.

Desde los 16 años me tiraba horas leyendo periódicos en el casino. Tantas que alguna vez me llegaron a echar.

¿Tampoco echa de menos ahora la alcaldía de Sueca?

Es mucho más pesado ser alcalde que ser diputado. Tiene mayor coste personal. Algún sábado a la noche, cenando con mi mujer, he notado un brazo en la espalda de algún vecino que me recriminaba una multa.

Citaba usted a Allende: “Mucho más temprano que tarde, de nuevo se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre”…

Es nuestro deseo que tenga lugar el cambio en el que los ciudadanos pusieron sus esperanzas. Vengo del Mercadona de comprare el avío y me lo han preguntado hasta cuatro personas: “Habrá cambio, ¿no?”, me preguntan. Nosotros lucharemos por que lo haya. Eso es lo que quería expresar.