MADRID.- A la alcaldesa de Madrid Manuela Carmena le ha caído una lluvia de críticas por parte de la derecha mediática y varios políticos esta semana por proponer organizar un concurso de recogida de colillas para niños. La última en criticar esta medida ha sido Soraya Sáenz de Santamaría durante una rueda de prensa del Consejo de Ministros el pasado viernes. Resulta paradójico porque este mismo año el Ministerio de Medio Ambiente premió un chiringuito por una iniciativa prácticamente igual a la de Carmena. 

El objetivo de la alcaldesa con este concurso era reducir el nivel de basura en la ciudad y fomentar su colaboración en las campañas de limpieza. "Estamos viendo la posibilidad de que hagamos una campaña divertida, que les demos unas tarjetas rojas a sus padres cuando vean que tiran una colilla o un papel al suelo. O un concurso de ver quién recoge más colillas y darles unos premios", dijo Carmena desde París en una reunión de alcaldes de grandes metrópolis en el marco de la cumbre del clima (COP21). 

Lo curioso es que la directora general de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, Raquel Orts, entregó en Alicante el Premio 'Chiringuito por el Clima 2015' al establecimiento 'Cala Bosque' de Orihuela por ser el que más compromisos por el Clima ha movilizado en el marco de la campaña 'Un millón de compromisos por el Clima'.

"De Madrid al cielo sí, al suelo no"

Así, el Ministerio valoró que con la iniciativa se consiguió cerca de 6.000 compromisos de los que más de 4.000 pertenecen al chiringuito ganador. El objetivo de la campaña ministerial era "involucrar" a los ciudadanos y a la entidades en la lucha contra el cambio climático.

La campaña por la que este chiringuito de Alicante fue premiado consistía en el reparto de unos vasos a todos los turistas, niños incluidos, según el periodista Miguel del Rosal en el blog La línea de fuego. Todo aquel que devolviese el vaso lleno de colillas recibía una consumición gratis. Una idea que recuerda en buena medida a la que acaba de proponer Carmena.

El galardón reconocía la labor de los chiriguitos como divulgadores de la acción frente al cambio climático y su implicación para conseguir compromisos por el clima como desafío colectivo para la Cumbre del Clima en París.

A pesar de las críticas por parte del PP, según la alcaldesa, su equipo quiere llevar a cabo "medidas de entusiasmo y de concienciación", entre las que se incluyen el reparto de un cenicero con el mensaje "De Madrid al cielo sí, al suelo no". El Ayuntamiento colgará igualmente carteles al respecto, que se verán "pasada la Navidad".

En su opinión, el nivel de las colillas que se tiran al suelo en la capital española "es impresionante", lo que supone un problema porque "tardan muchísimo en desintegrarse y es un atentado al medio ambiente muy importante".