El salto de Tania González al europarlamento llegó meses después de las elecciones, cuando el exfiscal anticorrupción Carlos Jiménez Villarejo cumplió lo prometido y abandonó su escaño, poco después de tomar posesión de su acta de eurodiputado de Podemos. Hoy, cuando las encuestas les auguran un resultado mucho mejor que al registrado el 25 de mayo, la número seis en las listas a los comicios europeos y profesora de formación profesional firma uno de los documentos sobre los principios constitutivos de Podemos que goza de mejor acogida entre los internautas.

Un documento que, como ella misma reconoce,  se cimenta en el borrador del equipo de Pablo Iglesias (Monedero, Errejón, Alegre y Bescansa), pero se centra en el ámbito municipal y autonómico. 'Veíamos que quizás no se estaba concretando lo suficiente', explica a Público la eurodiputada asturiana. 'Hemos llegado a esto desde nuestro día a día, y una problemática con la que venimos peleando es cómo organizarnos a nivel asturiano para tener una política común y coherente en Asturias', explica. 'Es una propuesta más descentralizada, para que cada territorio pueda adecuarse a su realidad'.

Podemos participar más, el documento que firman la eurodiputada González y simpatizantes de la formación como Daniel Ripa o Diego Pacheco, aboga por constituir la organización en torno a una Asamblea Ciudadana, un Consejo Ciudadano Estatal y un Consejo de Coordinación, -exactamente como plantea el líder de Podemos-, y pretende replicar esta estructura en las autonomías y en las ciudades más grandes, intentando 'mantener la eficacia' aunque el esqueleto de Podemos se vuelva muy grande.

En relación a las posibles alianzas con otras fuerzas como IU o Ganemos de cara a las municipales y autonómicas, la eurodiputada defiende que son los círculos de ciudades y autonomías quienes deben decidir 'mientras sean coherentes con el proyecto estatal', pero no suelta prenda sobre la política de alianzas que a su juicio debería seguir Podemos en las generales de noviembre de 2015.

Tampoco aclara si presentará su candidatura a uno de los cargos orgánicos del partido -dice querer estar segura de que se sentirá 'cómoda' defendiendo la estructura que resulte de la asamblea, que debe ser 'muy participativa'-, y aunque propone que haya entre dos y cuatro portavoces en los niveles municipal y autonómico, defiende la idea del equipo de Iglesias de nombrar un solo portavoz nacional porque 'genera más coherencia'. Eso sí, siempre con revocación permanente; uno de los conceptos más utilizados en su borrador organizativo, junto a otros como referéndum o igualdad de género. Propone que en los cargos de todos los niveles haya la misma proporción de hombres y mujeres, e incide sobre aspectos como la conciliación de la vida laboral y familiar, 'para que mucha gente pueda participar'.

Con una larga trayectoria en distintos movimientos sociales, González sabe que estas plataformas han elevado al argumentario del debate político problemas a los que hasta ahora no hacían referencia los partidos tradicionales.

'Le damos importancia al papel de movimientos sociales, a que tengan fuerza y tengan vida para poder conseguir un cambio político, y tenemos que seguir las líneas de movimientos que están trabajando cuestiones específicas, como la PAH. Nos parece que de la PAH puede surgir una propuesta programática que podríamos compartir, siempre que sea en beneficio mutuo; por el beneficio de la mayoría y el de la democracia', defiende.'Podemos no ha venido a sustituir a ese tejido social, sin el que no es posible el cambio', añade.

Por ello, apuesta por organizar asambleas con estos agentes, para incorporar algunas de las ideas de movimientos y plataformas sociales, que a su vez servirían como difusores de las propuestas de Podemos, pero manteniendo su autonomía.

Poco más de un día antes del encuentro organizado por el también eurodiputado Pablo Echenique para unificar borradores, que no ha sido secundado por el círculo de Iglesias, González no sabe si algún miembro de su grupo de trabajo acudirá a la cita de este sábado. 'Lo estamos hablando porque el proceso de transfusión con otras propuestas organizativas es algo que se va haciendo día a día, y esto puede ser algo más anecdótico que otra cosa, no lo tenemos claro, porque no todo el mundo puede asistir', asegura. 'Creo que no hay nada que nos facilite más posibilidades de participar que el espacio virtual, y la muestra es la participación en Plaza Podemos, aunque sabemos que no es suficiente', apunta.

No esconde que la brecha digital es uno de los problemas a los que se enfrentan estas herramientas, y reconoce que 'hay muchas personas que no tienen formación o habilidades', por lo que necesitan seguir habilitando espacios para la participación personal, sin ordenadores de por medio. 'Por eso en las europeas pusimos puntos presenciales con compañeros que ayudaban a votar, y por eso queremos que en los Círculos se fomente la formación en estas competencias: no todo el mundo las tiene', zanja.

De momento, el borrador de González ya ha experimentado cinco transacciones con otras propuestas, pero aún estudian la fusión con otras diez, y no descartan que esta cifra aumente. 'Mientras uno no absorba a otro, sino que se complementen,  y nuestro borrador conserve sus señas de identidad, podemos hacerlo', apunta.

El próximo fin de semana, los impulsores de los más de 250 documentos presentados para la Asamblea Ciudadana Sí Se Puede defenderán sus propuestas de forma presencial, y sólo tres de ellas (una de principios políticos, otra de organizativos y otra de principios éticos) serán inmediatamente asumidas por Podemos cuando se cierren las votaciones.

'Hay muchas propuestas encima de la mesa, creo que son incontables', afirma González.'Si sólo hubiera una o dos sería más complicado; ha habido mucha gente que ha querido dar su aportación, ha habido debate en Plaza Podemos, y esto ha permitido tener feedback. La participación ha sido importante', apunta. 'Lo más bonito es que se ofrezcan muchas opciones en cuanto al modelo organizativo, y que el modelo que adoptemos surja de la participación de mucha gente. Esa pluralidad es fundamental para que haya un proyecto democrático sano', concluye.