El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, volvió a rechazar este miércoles la pretensión del presidente de la Generalitat catalana, Artur Mas, de pactar con el Ejecutivo central la celebración de un referéndum sobre la independencia de Catalunya, explicando que 'lo que era ilegal hace un año lo sigue siendo ahora'. Rajoy ha afirmado que la consulta definitiva que reclama Mas 'no puede ser y no será' porque su convencimiento de que 'la independencia es mala para los catalanes y para el resto de españoles' no ha cambiado.

'Mas me sugiere que reanude el diálogo y yo nunca me he negado a ello, ni con él ni con nadie. Creo en el diálogo para resolver problemas políticos, pero todo diálogo en el que yo intervenga debe enmarcarse en los límites que marca la Constitución y en las obligaciones de mi cargo', ha afirmado Rajoy.

Mas 'tendría que haber empezado planteando una reforma constitucional', ha dicho RajoyEl presidente del Gobierno ha recordado que el Parlament de Catalunya está facultado para iniciar un proceso de reforma constitucional, que es 'el único camino legal para llevar a cabo los planteamientos de Mas'. 'Tendrían que haber empezado por ahí. Mas tiene un camino legal para conseguir lo que quiere. Lo que no tiene son los apoyos para recorrerlo', ha sentenciado para luego dejar claro que se opondrá a 'cualquier reforma' de la Constitución que 'liquide' la soberanía nacional.

'No estoy dispuesto a atender ningún desafío que se plantee desde la ilegalidad, que nadie aspire a sacar ventaja política de un acto ilegal', ha repetido Rajoy, quien ha señalado que 'el diálogo sólo da frutos cuando hay lealtad institucional'. 'No se puede condicionar el diálogo a lo imposible ni fijar de antemano el final de ese diálogo. Ese es el diálogo al que se imvita', ha protestado. 

Asimismo, Rajoy ha cuestionado que la consulta del pasado domingo en Catalunya haya sido un éxito, como dice el Govern, y ha afirmado que 'se produjo un profundo fracaso del proyecto independentista'. 'Hemos constatado una verdad ya conocida, y es que hay más catalanes que independentistas, que Catalunya es plural y que Mas no puede llevar a cabo su objetivo sin provocar una fractura'.

Por otra parte, Rajoy ha defendido que el Ejecutivo ha actuado con 'proporcionalidad' ante el proceso participativo del 9-N y se ha comportado de forma 'sensata y equilibrada'. Ha opinado que haber tomado otra decisión -como retirar las urnas- sólo habría servido para generar más tensión y dificultades.