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Programa de Gobierno Sánchez anuncia una batería de medidas económicas, sociales y de regeneración

Prohibirá las amnistías fiscales, subirá impuestos a las grandes empresas y al banca, aprobará un plan de empleo juvenil, endurecerá las normas contra la contratación irregular y suavizará el déficit de gasto de las autonomías.

Pedro Sánchez en el Congreso.

Más de hora y media utilizó de tiempo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para explicar ante la Cámara Baja su proyecto de Gobierno, que denominó genéricamente como “la agenda del cambio”. No hubo anuncios nuevos respecto a los ya conocidos a través de su equipo de Gobierno en las comparecencias de la semana anterior, pero sí compromisos claros y concreto del presidente en múltiples temas que constituyen todo un programa de Gobierno, que tendrá muchas dificultades para desarrollarse en sólo dos años.

Sánchez marcó varias áreas de actuación: crecimiento económico y creación de empleo digno y de calidad, cohesión social y territorial, regeneración democrática y una apuesta inequívoca por la UE. Y, a raíz de estos temas generales, desgranó toda una batería de medidas a llevar a cabo.

Batería de medidas

Para empezar, justificó que el Gobierno no haga públicos los nombres de las personas beneficiadas por la amnistía fiscal que decretó el Gobierno del PP por no tener cobertura legal para hacerlo, en contra de lo que prometió y a lo que se comprometió cuando estaba en la oposición. Eso sí, Sánchez, anunció que su Gobierno prohibirá por ley las amnistías fiscales en España.

Además, propondrá un plan de choque para mejorar la calidad del empleo juvenil, el reparto entre las tres administraciones de las cinco décimas adicionales de déficit autorizadas por la UE, y una reforma fiscal que afectará a las grandes empresas, a la compañías tecnológicas y a la banca. También anunció que el Gobierno presentará una propuesta para rediseñar el impuesto de sociedades, un plan director contra la explotación laboral que acabe con los falsos autónomos y la temporalidad, un plan de prevención y lucha contra el fraude, una nueva regulación de las prácticas laborales y un Estatuto del becario.

Y, como estaba previsto, confirmó que el Gobierno suavizará el objetivo de déficit de las comunidades autónomas, y que el 0,2 del medio punto autorizado por la UE también irá a parar a las arcas autonómica. Sánchez abordó los otros grandes objetivos políticos continuando con el anuncio de una cascada de medidas. Así, apuntó a medidas de autoconsumo energético, la exclusión del alquiler turístico de la ley de arrendamientos temporales, a la ampliación de la prórroga forzosa de alquiler de 3 a 5 años o apoyar la revalorización de las pensiones según el IPC.

Sánchez ha trasladado también su apuesta por el diálogo al portavoz de ERC, Joan Tardá, quien le ha advertido de que no le votará ninguna iniciativa si lo que pretende es "tomarles el pelo" y no hacer políticas de izquierdas, entre ellas dejar de negar la posibilidad de un referéndum en Catalunya. El jefe del Gobierno se ha mostrado convencido de que "la crisis sólo se va a poder resolver votando", pero ha precisado que, mientras el PSOE pretende votar un acuerdo, ERC quiere votar una "ruptura".

Sanchez, empezó su intervención reiterando que en breve se retirarán del Valle de los Caídos los restos del dictador Francisco Franco, “porque nuestra democracia tendrá símbolos que unan a la ciudadanía”, afirmó. Fue el momento más aplaudido por la Cámara, en un discurso que resultó largo y monótono.

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