El futuro secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha asegurado este jueves que no le va a 'temblar el pulso' en la lucha contra la corrupción y ha garantizado se van a 'asumir las responsabilidades' si algún caso afecta al PSOE, como se ha mostrado convencido que ocurrirá cuando acabe el periodo de instrucción del caso de los expedientes de regulación de empleo (ERE) irregulares tramitados por la Junta de Andalucía.

Así se ha pronunciado Sánchez en declaraciones a los periodistas, después de mantener un encuentro con el secretario general del UGT, Cándido Méndez, y al ser preguntado acerca de si han compartido preocupación por la situación del sindicato en Andalucía en relación con este asunto. Ambos han asegurado que no han abordado este asunto en la reunión que han mantenido en la sede de UGT, Sánchez ha garantizado que va a ser 'beligerante contra la corrupción' y ha recordado que ésta es también la postura de la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz.

Sánchez quiere tener cerca a los sindicatos

Sánchez opina que, en el asunto de los ERES, tanto la Junta de Andalucía como UGT están teniendo esta 'labor de beligerancia', porque 'han dado muchas explicaciones' y las van a seguir dando.Por su parte, el secretario general de UGT ha recalcado que este caso se encuentra en fase de instrucción, aunque ha subrayado que 'la única organización' que ha 'asumido responsabilidades políticas' en este caso 'ha sido UGT', cuyo secretario general en Andalucía dimitió 'sin estar imputado'. Sánchez ha explicado que, cuando asuma el liderazgo del PSOE, quiere tener un 'diálogo muy intenso y muy próximo con los sindicatos', que cree necesario para hacer frente a las políticas del PP, que ha 'utilizado la crisis como gran excusa para construir su modelo de sociedad, que es desigual' haciendo referencia a que la reforma laboral y la reforma fiscal 'nada tienen que ver con la crisis, sino con una forma de entender la sociedad y castigar al más débil'.

Tras su reunión con Mendez, Sánchez se ha visto con Pérez  Tapias y Madina en el Congreso por primera vez desde su elección. El próximo secretario general del PSOE ha asegurado que quiere una Ejecutiva con 'los mejores del partido'. En esa posición ha situado a los dos compañeros a quienes se enfrentó en las primarias internas, a los que ha ofrecido 'integración, unidad y cambio'.

Así, y aunque no ha querido dar detalles sobre los nombres que quiere incluir en su Ejecutiva, sí ha explicado que cree que 'en el equilibrio está la virtud', al ser preguntado si combinará ese intento de implicar a los mejores con la presencia de los territorios en la dirección. Lo único que ha subrayado es que va a contar 'con los mejores', va a hablar con 'todos los territorios' y los militantes, que han sido 'protagonistas' de este proceso, van a sentirse 'reconocidos y orgullosos' de la Ejecutiva.