El sindicato ESAN de la Ertzaintza ha reclamado que los agentes antidisturbios puedan hacer de nuevo uso del lanzamiento de pelotas de goma en altercados multitudinarios como los ocurridos el pasado jueves en Bilbao entre radicales del Athletic Club y del Spartak de Moscú. "No puede ser que hagamos un cuerpo a cuerpo con equipos tácticos que pesan 25 kilos. No somos operativos", ha indicado el secretario general de ESAN, Eneko Urkijo.

Cientos de personas se han concentrado este sábado al mediodía en la explanada del campo de fútbol de San Mamés, en Bilbao, en repulsa de los incidentes que protagonizaron los aficionados radicales del Athletic Club y del Spartak de Moscú, y han recordado a Inocencio Alonso, el ertzaina que sufrió un infarto que le provocó la muerte mientras trabajaba en el operativo policial que intentaba evitar los altercados en las inmediaciones del estadio.

Tras el acto, Urkijo ha reclamado un cambio en las formas de trabajo de la Ertzaintza, ya que, aunque Inocencio falleciera por un infarto de miocardio, ha alertado de que llevaba más de doce horas ejerciendo labores de antidisturbio.

"Hay que cambiar las condiciones laborales y hay que evitar los enfrentamientos cuerpo a cuerpo", ha reclamado el secretario y afirmado que "no tenemos el número suficiente de ertzainas como para hacer frente a un nutrido grupo de gente que quiere atacar a ciudadanos, policías o aficionados del equipo contrario".

Según Urkijo, ese modelo policial es "el único que se puede utilizar en Euskadi", y el representante defiende que "las pelotas que lanzábamos no eran para hacer daño, eran para mantener distancia de seguridad".

También ha añadido que, en su opinión, el cuerpo a cuerpo "puede funcionar en las policías europeas como las de Alemania o Suecia, en las que hay una manifestación de mil personas y hay otros mil policías enfrente", pero que "aquí no es el modelo".

Por otro lado, Urkijo ha manifestado que "no podemos permitir ni un minuto más que los partidos de fútbol y cualquier acontecimiento deportivo se conviertan en batallas campales". "Hay que desterrar la violencia de cualquier tipo de deporte. Los políticos tienen que tomar medidas, el Athletic Club también, y el resto de equipos deben desterrar la violencia del mundo del fútbol", ha añadido.