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Los botes de judías con botulismo llegaron al canal de venta por error, según la empresa Hermanos Cuevas

La empresa riojana cree que, según sus conclusiones provisionales, un error humano pudo introducir en los comercios, de forma accidental, una partida de botes de cristal de alubias blancas cocidas que estaba aislada y en la que se ha confirmado la presencia de la toxina.

EFE

LOGROÑO/BARCELONA.- La empresa riojana Hermanos Cuevas cree que, según sus conclusiones provisionales, un error humano pudo introducir en el canal de venta, de forma accidental, una partida de botes de cristal de alubias blancas cocidas que estaba aislada y en la que se ha confirmado hoy la presencia de toxina botulínica. Así lo ha explicado hoy a Efe el portavoz de la empresa, Juan Ramón Hidalgo, tras conocerse que la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aecosan) ha confirmado la presencia de la toxina botulínica en un bote de cristal de alubias blancas cocidas que consumieron el pasado día 27 dos bomberos de Palafrugell (Girona) hospitalizados por un brote de botulismo.

Hidalgo, experto en derecho alimentario, ha señalado que la propia empresa, de forma interna, detectó el pasado 20 de mayo una anomalía de calidad en una partida antes de salir al mercado, por lo que fue apartada del canal de distribución y fue convenientemente aislada y precintada. Desde que se produjo la alerta sanitaria, la dirección de la empresa formó un comité de crisis interno para "tomar rápidamente las medidas necesarias que minimizaran con la mayor urgencia cualquier tipo de riesgo" e inició una investigación interna.

"En este momento, investigamos las circunstancias por las que algunas de las unidades aisladas en la empresa fueron reincorporadas accidentalmente al canal de venta y los datos provisionales indican que pudo deberse a un error humano en el control del producto", ha asegurado. Ha reiterado el compromiso de la empresa de "total claridad y transparencia" en este caso porque lo que le importa es la seguridad del consumidor, por lo que ha recomendado a cualquier persona que hubiera adquirido uno de los productos incluidos en la alerta que se abstenga de consumirlo como medida de prevención y proceda a su devolución en el punto de venta.

La investigación interna de la empresa se mantiene abierta para comprobar si algunos otros botes de la partida afectada, cuyo número no se ha determinado, pueden estar aún en el canal de venta, aunque parece que "el riesgo es bajo", dado que se ha actuado con "transparencia y celeridad" ante las autoridades sanitarias, clientes, proveedores y consumidores. Ha aclarado que las marcas investigadas son Bon Preu (mongetes cuites), Condis (alubias mongetes-beans), El Cultivador/Aldi (alubias cocidas extra), IFA Eliges (alubias blancas cocidas extra) e Hiper Dino (alubias blancas cocidas extra).

Hidalgo ha relatado que la empresa fue alertada el pasado día 28 por un cliente de un posible caso de botulismo por ingesta alimentaria en Catalunya. Las autoridades sanitarias, al día siguiente, acudieron a la empresa para realizar una inspección y requirieron la trazabilidad y registros de fabricación de algunos lotes; y, el día 30, como medida de precaución, se ordenó la retirada del mercado de todos los botes implicados. La dirección de la empresa, ante la "gravedad" de la situación, ordenó inmediatamente una investigación "exhaustiva" sobre el posible origen del problema y ha trasladado a la autoridad sanitaria las primeras conclusiones y la documentación técnica.

La Agencia de Salud Pública de Cataluña ha levantado hoy las medidas cautelares de retirada del bacalao desmigado desalado que elabora la compañía catalana Copesco Sefrisa, tras descartase que el producto sea el origen de los dos casos de botulismo diagnosticados en Palafrugell (Girona). La Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aecosan) ha confirmado hoy la presencia de la toxina botulínica en uno de los botes de cristal de judías blancas cocidas que consumieron el pasado día 27 dos bomberos de Palafrugell, que están en estado grave hospitalizados por un brote de botulismo.

Según ha informado la compañía alimentaria, la Agencia de Salud Pública de Cataluña ya les ha transmitido el acta de su expediente en el que ha confirmado que "quedan sin efecto las medidas cautelares dictadas en relación con el producto 'Desmigado bacalao desalado" Bon Preu y Royal, envasado por Copesco Sefrisa". En consecuencia, la empresa ha anunciado que ha comenzado a comercializar los productos que mantenía inmovilizados de manera preventiva.

Según ha confirmado hoy el secretario de Salud Pública de la Generalitat, Joan Guix, "ya se ha descartado el bacalao como causante del brote y se puede consumir con total tranquilidad". La compañía Copesco Sefrisa, propietaria de la marca Royal, ha subrayado que "desde el primer momento ha actuado de manera inmediata y proactiva, poniéndose a disposición de la Agencia de Salud Pública de Cataluña, con quién ha colaborado estrechamente desde la detección del brote de botulismo".

Copesco Sefrisa ha asegurado que sigue "escrupulosamente los más estrictos protocolos y controles de seguridad de calidad en la elaboración de todos sus productos, incluso más allá de la normativa establecida". Copesco Sefrisa tiene su sede Sant Esteve de Sesrovires (Barcelona) e inició su actividad relacionada con el mundo del bacalao en el año 1853. Royal es la marca líder en España en elaboración y distribución de bacalao desalado.

Paralelamente, el grupo de distribución IFA, que agrupa a más de 5.000 establecimientos en toda España, ha asegurado hoy en un comunicado que sus asociados ya han retirado en tienda y bloqueado en sus almacenes los lotes de alubia blanca cocida en los que se ha confirmado la presencia de toxina botulínica.

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