MADRID.- El Sindicato de Estudiantes de la Universidad Complutense de Madrid ha mostrado su oposición al plan de reestructuración interna propuesto por el rectorado, encabezado por Carlos Andradas, por el cual el número de departamentos quedaría reducido a más de la mitad.

El comunicado lanzado por el sindicato califica de "devastadores" los efectos que tendría el plan si finalmente se llevase a cabo. Los estudiantes denuncian la propuesta de un plan que, afirman, tendrá "graves consecuencias, no solo para los estudiantes sino también para los profesores y trabajadores de la universidad, que sufrirán despidos, masificación y empeoramiento en sus condiciones laborales".

El proyecto supondría un refuerzo de las asignaturas afines, en lugar de contratar a personal docente especializado, algo que sería "lo más necesario para garantizar la calidad de estas materias", afirman.

"Si alguien pretende convencernos de que esto es un avance para la calidad de la Universidad, es que nos toma por tontos", sentencian los estudiantes en el manifiesto publicado bajo el título 'La UCM bajo ataque'.

El sindicato opina que la fusión de departamentos supone un "paso gigante" hacia la fusión de centros, una de las reformas que el gobierno del Partido Popular pretendía poner en marcha.

El plan de reorganización cuenta, además, con la oposición de UGT y CC.OO y el personal docente de la universidad, que ha puesto en marcha una plataforma con el objetivo de paralizar el proyecto y pedir la apertura de debate. Tanto sindicatos como profesores afirman que la razón del proyecto es económica y cuestionan que la fusión de departamentos vaya a mejorar la calidad educativa, algo que ha negado el Rectorado que defiende que el objetivo del proyecto es lograr una investigación y docencia "con una mayor solvencia y calidad" y "favorecer el crecimiento y fortalecer la Universidad y sus estructuras".

La propuesta del rectorado, presentada de forma interna, contempla un proyecto de fusión que, en caso de ser aprobado, supondría una reducción de, al menos, el 60% del número de departamentos, de 185 a 72.