La Agencia Internacional de la Energía (AIE) advirtió ayer de un futuro energético 'insostenible' si no se acometen las inversiones necesarias ante el incremento de la población mundial. 'A corto plazo', el precio del barril de petróleo podría llegar a los 150 dólares, según su directora ejecutiva, Maria van der Hoeven. La organización, adscrita a la OCDE (Occidente), cree que se necesitarán 38 billones de dólares hasta 2035 en infraestructuras energéticas. Casi dos tercios corresponderían a países no OCDE, que concentrarán el 90% del aumento de la población y de la demanda energética hasta 2035, así como el 70% del crecimiento del PIB.

El organismo prevé que el peso de los combustibles fósiles siga predominando, aunque pasarán a aportar el 75% de la energía primaria en 2035, frente al 81% actual. Las renovables pasarán del 3% de 2009 al 15%, pero requerirán quintuplicar las subvenciones, hasta 180.000 millones de dólares al año. El organismo reitera su crítica a los subsidios a los combustibles fósiles, que en 2010 superaron los 400.000 millones de dólares, un 28% más. Respecto al petróleo, prevé un alza acumulada del consumo del 13,7% porque el parque mundial de vehículos se duplicará, hasta casi 1.700 millones de unidades.

El organismo asegura que frenar los planes de expansión nuclear tras la catástrofe de Fukushima 'complicaría' el panorama de los países emergentes, aunque considera que las consecuencias serían 'particularmente serias' para los países que no tienen petróleo.