Amos Oz y Saramago participan en un ciclo sobre literatura y compromiso que abrirá Mendicutti

José Saramago, Amos Oz y Bernardo Atxaga son, además de escritores, personas que han hecho público su compromiso político, dos condiciones por las que han sido elegidos por la Fundación Idi Ezkerra para participar en un ciclo denominado "Letras por la paz", que abrirá mañana en San Sebastián Eduardo Mendicutti.

Esta fundación, vinculada a Ezker Batua, ha concebido la nueva iniciativa a partir de la figura de Atxaga como "piedra angular", en torno a la cual "se construirá el resto del andamiaje" de un proyecto con vocación de "largo recorrido", ha explicado hoy Idi Ezkerra en un comunicado.

El autor de "El palomo cojo" y "Los novios búlgaros" estrenará mañana el ciclo en la donostiarra sala Doctor Camino, una primera cita que coincide con la celebración del Día Internacional por la no violencia y la paz, que se conmemora con motivo del aniversario del asesinato de Gandhi.

A Mendicutti seguirán en 2008 el propio Atxaga, el 20 de junio, Amos Oz, en abril o septiembre, y Saramago, en el caso de que su salud lo permita.

No serán siempre los mismos recintos ni las mismas ciudades donde intervengan estos escritores, ya que por ejemplo el último premio Príncipe de Asturias de las Letras, Amos Oz, probablemente visite Bilbao.

Premios Nobel como Nadine Gordimer, Coetzee o Wole Soyinka son algunos de los escritores a los que Idi Ezkerra tiene intención de dirigirse para participar en "Letras por la paz. Literatura y compromiso político".

También están en la lista la argelina Assia Djebar, la colombiana Laura Restrepo, el irlandés Colm Tóibín, el libanés Amin Maalouf, el iraquí Jabbar Yassin Hussin, el israelí Abraham B.Yehoshúa o el poeta palestino Mahmud Darwish.

La idea es que se sumen al proyecto como conferenciantes o tertulianos, pues la Fundación desea también recuperar el contacto literario entre escritores, "una práctica tan habitual en los siglos XIX y XX que hoy en día casi se ha perdido".

Idi Ezkerra destaca que, aunque "son representativos de diferentes culturas y tradiciones literarias, con experiencias vitales y estilos diversos", están unidos por "un anhelo común: su deseo de trabajar a favor de la paz y la reconciliación".