El Ballet Nacional homenajea a Antonio "El Bailarín", Dalí y Lorca en el Real

Dos coreografías unidas en una, que lleva por título "Elegía-Homenaje (a Antonio Ruiz Soler) y El Café de Chinitas", es la propuesta que el Ballet Nacional de España, dirigido por José Antonio, llevará al escenario del Teatro Real durante la semana del 1 al 7 de marzo.

Ambas piezas tienen como principal nexo el hecho de que, según ha explicado hoy su creador, José Antonio, rinden homenaje a "personajes y grandes mitos del baile, la pintura y la poesía", como Antonio "el Bailarín", Dalí y Lorca.

"Elegía-Homenaje (a Antonio Ruiz Soler)", que fue estrenada en 1999 en Granada e interpretada en el 2006 en el Teatro de la Zarzuela, recuerda "desde la admiración y la emotividad" la figura de Ruiz Soler, varias veces Premio Nacional de su arte y director del Ballet Nacional del 81 al 83.

Con música del maestro Joaquín Turina, José Antonio hace su particular tributo al maestro, doce años después de su fallecimiento, y para ello elige uno de los momentos más emblemáticos del baile español en el extranjero: el triunfo de la pareja Rosario y Antonio en los Estados Unidos.

"Empecé con 14 años a bailar con él y me han movido a crear este espectáculo muchos recuerdos entrañables, que guardo en el corazón", ha confesado José Antonio, quien ha intentado que quede bien reflejado el mundo y la estética de Ruiz Soler, pero desde su "propio lenguaje" artístico.

"El Café de Chinitas", creado para la celebración del nacimiento de Dalí en 2004 gracias a la colaboración de cinco grandes festivales españoles, une la simbología del pintor de Figueras con las canciones populares de Lorca para ahondar, en clave "absolutamente flamenca", en el periodo más tempestuoso de la relación entre los artistas.

"La historia está cargada de sugerencias, las personas que conocen la biografía de ambos entenderán muchos detalles", ha explicado José Antonio, que ha dividido la pieza en tres actos: la creatividad, el sexo y la muerte.

Con la música de Chano Domínguez y la voz de la cantaora Esperanza Fernández como hilo conductor del recorrido, "El Café de Chinitas" se impregna de la estética "daliniana" y reconstruye los telones que pintó el catalán para una obra estadounidense de los años cuarenta, inéditos en Europa.