La sustitución del consejo de administración de Caja Castilla La Mancha (CCM) fue el primer paso, pero sólo era cuestión de tiempo que hubiera nuevas destituciones. El Banco de España relevó ayer al director general de la entidad financiera, Ildefonso Ortega.

En la mayoría de las cajas de ahorros, el director general es quien lleva las riendas del negocio, mientras que el presidente tiene una función meramente institucional. En el caso de CCM, el presidente Juan Pedro Hernández Moltó tenía funciones ejecutivas, que compartía con Ortega, su número dos.

Veinte días después de hacerse con la gestión de la caja y antes de concluir su estudio sobre la verdadera situación financiera de la entidad, el Banco de España ha decidido quitarle del cargo. De esta forma, Ortega vuelve a su categoría anterior (jefe de primera), aunque nada más comunicarle la destitución decidió acogerse a la prejubilación parcial. Dejará la entidad sin percibir indemnización alguna.

Los nuevos administradores de la caja siguen analizando las cifras y su intención es rehacer las cuentas del año pasado, que pasarán de 30 millones de beneficios a cuantiosas pérdidas. Cuando se haya finalizado ese informe, el Banco de España estará en disposición de decidir si abre un expediente sancionador al consejo de administración y a los directivos que han llevado a la caja a esta situación.

Gorka Barrondo sustituirá a Ortega. Hasta ahora era director de la División Financiera, Banca de Inversión y Gestión de Activos.