El Banco Central Europeo mantuvo sin cambios el jueves los tipos de interés al 1 por ciento, tal y como se esperaba, y estimó una recuperación económica desigual y moderada.

Tras un agitado mes en el que la institución dejó de lado sus reticencias a comprar deuda estatal y dio marcha atrás en su estrategia de retirada de medidas de liquidez extraordinarias, la decisión del BCE de mantener los tipos era ampliamente esperada.

La totalidad de los 79 economistas recientemente consultados por Reuters [ECB/INT] no habían previsto ningún movimiento.

En cuanto al crecimiento, Trichet avanzó un alza moderada e irregular de la economía de la región.

"Es probable que las tasas trimestrales de crecimiento sean bastante desiguales", dijo Trichet en rueda de prensa. "Esperamos que la economía de la eurozona crezca a un ritmo moderado en un entorno de continuadas tensiones en algunos segmentos del mercado y de incertidumbre inusualmente alta".

El personal del BCE elevó sus previsiones de PIB para este año, situando el crecimiento en una banda del 0,7 al 1,3 por ciento. Pero para 2011, rebajó su previsión de crecimiento a entre un 0,2 y un 2,2 por ciento -pese a que la debilidad del euro podría potencialmente impulsar las exportaciones.

Según los economistas, un descenso del 5 por ciento en el euro podría impulsar el crecimiento de las 16 naciones que comparten el euro en torno a un 0,4 puntos porcentuales.

El euro reducía sus ganancias frente al dólar tras los cautelosos comentarios de Trichet sobre la economía de la zona euro pero después volvió a rebotar a máximos de la sesión.

Trichet fue presionado sobre el repentino movimiento del BCE para comprar bonos el mes pasado para ayudar a combatir los mercados de la eurozona, abandonando su reiterada resistencia, pero no hizo demasiados comentarios.

El BCE había comprado bonos por 40.500 millones de euros el viernes. Pero todavía no ha dado pistas sobre cuánta cantidad está preparado para gastar y por cuánto tiempo podría mantener el programa de compra de bonos.

notablemente, España", dijo el economista de Nomura, Laurent Bilke.

MERCADOS MONETARIOS

Los problemas de deuda en Grecia, Portugal, España y otros países de la zona euro han reavivado los temores sobre la salud de los bancos comerciales de la región.

Las tensiones han dañado las operaciones del mercado monetario, forzando al BCE a dar marcha atrás en su estrategia de salida y reintroducir los préstamos en dólares, inyectar otra ronda de subastas a seis meses y ampliar las subastas ilimitadas a tres meses.

Los mercados están también preparándose de cara al 1 de julio, cuando los bancos tienen que devolver la cifra récord de 442.000 millones de euros que tomaron prestada el año pasado.