Este artículo se publicó hace 15 años.
Bekele logra el primer doblete de fondo
El etíope Kenenisa Bekele, campeón olímpico de 5.000 y 10.000 metros, remató el primer doblete de fondo en unos Mundiales al ganar la final de los cinco kilómetros en un mano a mano con el defensor del título, el estadounidense Bernard Lagat, en una jornada amarga para la española Natalia Rodríguez, descalificada tras ganar la final de 1.500.
Seis días después de haber obtenido su cuarto título en 10.000, Bekele venció con una marca de 13:17.09, por delante de Lagat (13:17.33) y del qatarí James Kwalia (13:17.78). Nadie, ni siquiera el etíope Haile Gebreselassie, había conseguido semejante doble triunfo en doce ediciones de los Mundiales.
La carrera llegó viva a la última recta. Lagat, un hombre de 1.500, se encontró en posición ideal cuando al desembocar en la recta estaba emparejado con Bekele, al fin y al cabo un fondista, pero no contaba con la pegada del etíope, que esta vez, a diferencia de París 2003, no dejó escapar su presa.
La española Natalia Rodríguez, que había cruzado la meta en primer lugar en la final de 1.500 metros, fue descalificada por obstaculizar a la etíope Gelete Burka, que cayó al suelo, y en consecuencia la bahrainí Maryam Yusuf Jamal, que había sido segunda, revalidó su título.
Rodríguez había conseguido la victoria con un tiempo de 4:03.36 pero el roce con Burka, cuando la tarraconense intentaba pasar por dentro al entrar en la última curva, le costó una medalla de oro que, a juzgar por su gran superioridad en la recta, probablemente habría ganado también de no haber mediado el incidente.
Rechazada la reclamación española por el Jurado de Apelación, la Jamal fue declarada vencedora con un tiempo de 4:03.74. La medalla de plata fue para la británica Lisa Dobriskey (4:03.75) y la de bronce para la estadounidense Shannon Rowbury (4:04.18).
En la final de 800, el sudafricano Mbulaeni Mulaudzi, subcampeón olímpico en 2004 y tercero en los Mundiales de 2003, consiguió con un registro de 1:45.29 su primera medalla de oro relegando al segundo puesto al defensor del título, el keniano Alfred Kirwa Yego.
Tras pasar los 400 en 53.44, Mulaudzi tomó la cabeza y no dejó que nadie le adelantara. Kirwa llegó a seis centésimas, y la medalla de bronce fue para el campeón de 1.500, el bahrainí Yusuf Saad Kamel, que pretendía igualar en una sola edición de los campeonatos los dos títulos que obtuvo su padre, el keniano Billy Konchellah, en 1987 y 1991.
En jabalina, después de quedarse dos Mundiales a las puertas de la gloria, el noruego Andreas Thorkildsen se proclamó campeón mundial con un lanzamiento de 89,59, tres metros superior al que le dio la plata a Guillermo Martínez (86,41), primer medallista cubano en esta especialidad.
Japón tuvo representación en el podio gracias al tercer puesto de Yukifumi Murakami (82,97) mientras que el defensor del título, el finlandés Tero Pitkamaki, quedó quinto con 81,90.
En longitud, la estadounidense Britney Reese se coronó con un salto de 7,10 en la tercera ronda. Fue la única que superó los siete metros. La rusa Tatyana Lebedeva cedió su título pero se aferró al podio al ganar la medalla de plata con 6,97. El tercer puesto fue para la turca Karin Mey con 6,80.
Los campeonatos del mundo de Berlín se cerraron con dos medallas de oro para Estados Unidos en el relevo largo: el femenino con una marca de 3:17.83 y el masculino con 2:57.86, en ambos casos mejores marcas mundiales del año.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.