La bolsa española ignoró el repunte del petróleo, subió el 0,53 por ciento y recuperó hoy el nivel de 13.900 puntos, animada por el avance de las plazas internacionales y de la mayoría de los grandes valores.

El índice de referencia del mercado nacional, el Ibex-35, subió 73,20 puntos, equivalentes al 0,53 por ciento, hasta 13.919,60 puntos, cota perdida a mediados de enero pasado.

Por su parte, el índice general de la Bolsa de Madrid avanzó el 0,45 por ciento; el Ibex Medium, el 0,13 por ciento, y el Ibex Small Caps, el 0,58 por ciento.

En Europa, con el euro a 1,572 dólares, Londres avanzó el 1,14 por ciento; París, el 0,89 por ciento; Fráncfort, el 0,85 por ciento, y Milán, el 0,81 por ciento.

La bolsa española empezó el día por encima de 13.900 puntos, con una subida moderada que se sustentaba en la depreciación del euro, en la subida de Tokio esta madrugada y en el cierre neutro de Wall Street el pasado viernes.

Animada por el empuje del sector financiero europeo y nacional, que recibía algunas recomendaciones, una hora y media después de la apertura la bolsa conseguía superar el nivel de 14.000 puntos, perdido el pasado 15 de enero, con un avance superior al 1 por ciento.

Sin embargo, el intento de superar esa resistencia -nivel que frena las subidas- resultó infructuoso, pues la ganancia empezó a menguar, en lo que influyó el avance del precio del petróleo Brent, que se cambiaba a más de 105 dólares.

Las previsiones de crecimiento para la economía española en este ejercicio publicadas por BBVA, entre el 1,7 y el 2,2 por ciento, y los problemas de liquidez de los bancos que anunciaba el Banco de España, afectaron ligeramente a la bolsa.

Así, el mercado se mantenía por encima de 13.900 puntos antes de la apertura de Wall Street, a lo que contribuía el buen comportamiento de los futuros estadounidenses.

Antes de la apertura del mercado neoyorquino la bolsa nacional bajaba hasta 13.900 puntos, nivel sobre el que oscilaba mientras asistía a los bandazos de la plaza estadounidense.

Aunque abría con ganancias, animada porque la firma hipotecaria Washington Mutual iba a efectuar una ampliación de capital de 5.000 millones de dólares, Wall Street iba liquidando sus ganancias y la bolsa española perdía la cota de 13.900 puntos, al tiempo que el petróleo superaba los 107 dólares por barril y el euro 1,57 dólares.

Al final de la sesión, con el apoyo de Telefónica y de Repsol y el repunte de la plaza neoyorquina, el mercado volvía a recuperar los 13.900 puntos.

De los grandes valores, sólo cayó Iberdrola, el 2,01 por ciento, la mayor del Ibex, mientras se hablaba de su posible fusión con Gas Natural y persistía el desinterés de EDF en la eléctrica española.

Repsol logró el mayor avance del Ibex, el 2,73 por ciento, al calor del alza del petróleo, mientras que Telefónica ganó el 1,66 por ciento; BBVA, el 1,02 por ciento, gracias a un informe de Merrill Lynch, y Banco Santander, el 0,75 por ciento.

Después de Repsol, el principal avance del Ibex correspondió a Sacyr, el 1,79 por ciento, ante la próxima salida a bolsa de Itinere, seguida de Telefónica, en tanto que Ferrovial subió el 1,3 por ciento, y FCC, el 1,26 por ciento.

Tras Iberdrola, las mayores pérdidas del Ibex recayeron en Gas Natural, que perdió el 1,81 por ciento; Técnicas Reunidas, el 1,48 por ciento; Iberia, el 1,11 por ciento, y Red Eléctrica, el 1,09 por ciento.

Con las "vacas locas" y la gripe aviar de fondo, Pescanova logró la mayor subida del mercado continuo, el 7,23 por ciento, mientras que Metrovacesa presidió nuevamente las pérdidas con una bajada del 3,81 por ciento.

La rentabilidad de la deuda española a largo plazo subió siete centésimas y se situó en el 4,31 por ciento, mientras que en el mercado continuo se negociaron 4.185 millones de euros, de los que algo menos de 1.000 correspondían a operaciones efectuadas por inversores institucionales.