El internacional italiano Gianluigi Buffon, portero titular del Juventus de Turín, abandonó hoy la clínica milanesa donde este domingo fue operado de una hernia de disco, intervención con la que el guardameta se ha quitado "un buen peso de encima" y de la que sale con "mucha confianza y serenidad".

"Me he quitado un buen peso de encima. Quizá esta intervención se debería haber hecho antes, pero, de todos modos, ha salido lo mejor posible y esto me da mucha confianza y serenidad", afirmó Buffon, de 32 años, a su salida de la clínica "La Madonnina", en declaraciones que recogen los medios italianos.

"Ahora no tengo que tener prisa, pero me tengo que tomar el tiempo necesario para volver sin ninguna molestia y sin ningún riesgo de recaída. Visto mi papel, creo que mi carrera es aún relativamente larga y sin la hernia podré alargarla más con altos niveles", añadió.

El guardameta, quien salió del centro médico por sus propios medios sin problemas para caminar, reconoció que el problema de la hernia lo acusaba ya desde el inicio de 2008 y que éste se agravó en los últimos meses al oprimir un nervio, algo que le llevó a retirarse en el primer partido del Mundial de Sudáfrica ante Paraguay.

Esta misma mañana, el portero del Juventus, que ahora deberá pasar dos semanas en reposo absoluto y que no se espera que vuelva a los terrenos de juego hasta dentro de tres meses, fue sometido a un control postoperatorio, que ha dado mejores resultados de lo esperado.

A su salida de la clínica, el italiano dio muestras de pensar ya no sólo en su vuelta al club turinés, sino también a la selección de Italia, que cuenta con un nuevo seleccionador, Cesare Prandelli, al que Buffon no conoce personalmente.

"Prandelli es alguien muy preparado, que acepta siempre el intercambio de opiniones con los equipos y no evita nunca la relación con sus jugadores: siempre he pensado que éste fuera un requisito importante, porque el entrenador tiene que formar parte del grupo", comentó el portero.

Buffon sigue lamentando la tempranera eliminación de Italia del Mundial de Sudáfrica, donde la selección de Marcello Lippi no llegó a clasificarse para octavos de final.

"Me agrada que en la semifinal haya muchos equipos europeos, lo que demuestra que el fútbol de nuestro continente está en la vanguardia y es el más competitivo. Encuentro que Uruguay es una bonita sorpresa, pero también Holanda y Alemania han ido mejor de los que se esperaba", apuntó.