Público
Público

La Caixa ingresa 1.650 millones con la venta de un 8,63% de Caixabank

El objetivo de la operación es reforzar la liquidez y el capital de la caja catalana y al mismo reducir su participación en su división bancaria como recomienda la UE

AGENCIAS

La Caixa ha puesto en marcha la venta de hasta un 8,63% del capital de su filial Caixabank a través de una emisión de bonos canjeables y una colocación de acciones de su división bancaria, por 1.650 millones de euros, con los que reforzará solvencia y liquidez.

Desde el punto de vista estratégico, el grupo La Caixa consigue mejorar en unos 100 puntos básicos su ratio de core capital en términos de Basilea II, situado ahora en el 11,9%, en un momento en el que la banca se prepara para afrontar una nueva evaluación de sus activos en Europa.

Paralelamente, Caixabank anunció el lunes una emisión de bonos convertibles en acciones de Repsol que también le permite reforzar su solvencia en lo que es una muestra más de la necesidad imperiosa por mejorar su balance ante las próximos pruebas de resistencia en 2014.

El nuevo entorno regulatorio introduce más presión para que La Caixa, que tiene la cartera industrial más importante de la banca española, adelgace su cartera de participadas. Con la emisión de bonos canjeables y la colocación de acciones anunciada el miércoles, la entidad también consigue ir avanzando gradualmente en el cumplimiento de las recomendaciones de la UE para ir reduciendo su peso en la filial bancaria hasta niveles no mayoritarios.

Previsiblemente, Caixabank reducirá su participación con estas dos operaciones hasta el 55,72% desde niveles en torno al 70% sin tener en cuentas las obligaciones convertibles y/o canjeables en circulación de Caixabank ahora mismo. 'Valoramos positivamente la operación para la Caixa que se ajustaría a las recomendaciones de Bruselas y el memorandum de entendimiento sobre el control de las cajas en los bancos', dijo Nuria Álvarez, analista de Renta 4, en una nota de análisis a clientes. No obstante, Espirito Santo manifestó que todavía persisitía una cierta presión sobre el valor por el 6 por ciento restante que La Caixa podría seguir teniendo que reducir en su filial para rebajar su participación por debajo del 50 por ciento.

En la actualidad, una nueva ley de cajas se encuentra en tramitación en el Senado con el objetivo final de rebajar el peso de los políticos en su gestión, separando el negocio bancario de sus fundaciones accionistas. Estas condiciones fueron impuestas por los socios europeos a cambio de una línea de crédito por importe de 41.300 millones de euros para que España saneara su banca.

Como parte de la operación cerrada el jueves, la Caixa vendió bonos canjeables en acciones de Caixabank por 750 millones, desde los 600 millones de euros anunciados la víspera gracias a una elevada demanda de 4.500 millones, fijando el precio de canje para los bonos en 4,55 euros, lo que equivale a un 3,37% de su capital. Los titulares de los bonos, que devengarán un interés fijo anual del 1% pagadero por semestres vencidos, podrán optar por convertirlos en acciones en diversas ocasiones durante los cuatro años de vida de la emisión. La Caixa podrá elegir entre dar acciones o una combinación de efectivo y títulos de su filial.

CaixaBank ha destacado el progresivo aumento que ha experimentado su free float (el porcentaje de acciones del capital social en manos de los minoritarios) desde la salida a bolsa de Criteria CaixaCorp en 2007, y que en ese momento fue de un 20%. Desde entonces, se han ido incorporando nuevos accionistas a través de diferentes emisiones de bonos convertibles en acciones, con lo que la base de accionistas se ha reforzado desde los 365.000 hasta los 745.000 actuales. Tras esta operación combinada, se volverá a incrementar el free float de CaixaBank, que pasa del 30% a alrededor del 44%, según ha destacado la entidad.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias